Desde que la Unesco les adjudicó el patrimonio cultural del Monte del TEmplo y del muro de los lamentos, construidos por judios cientos de siglos antes de la existencia del primer palestino, estos se encuentran lanzados hacia el estrellato.
Ya no se conforman con el Monte del Templo y con intentar borrar el milenario legado judio de la tierra de Israel.
Ahora parece ser que la Torre Eiffel es palestina según una exposición celebrada en Gaza el día de la Herencia Palestina: