Primero había que hacer una ley que no les permitiera presentarse. Y elaboraron la ley de partidos. Después se trataba de rectificar parte de la ley electoral --y no para una cuestión tan democrática como para que no se perjudicara a los partidos pequeños (un hombre/un voto), sino para dificultad la legalización de los herederos de Batasuna—, y la rectificaron.
Luego, Sortu –nuevo nombre de Batasuna— se presenta como partido político con unos estatutos que cumplen con la ley de partidos y todas las exigencias legales. Y se dice que no es suficiente, que tiene que romper con el pasado. Y Sortu va y declara alto y nítido que rompe. Y sigue sin ser suficiente. Ya están tirios y troyanos (PP y PSOE) diciendo que no basta.
Pero, vamos a ver: Si cumplen la ley, si además lo hacen rompiendo con el pasado y condenando el atentado que ETA pretendió cometer contra el Lehendaraki, si condenan la kale borroka. ¿Qué más tienen que hacer?
El gobierno está preso, por sus partes nobles, del PP, y tiene miedo de que empeoren todavía más sus expectativas electorales. Y el PP se negará hasta que esté en el poder, quiere apuntarse el tanto de la desaparición de ETA y no quiere que se lo apunte el PSOE. Y los dos salen beneficiados de que la izquierda abertzale, heredera de Batasuna, no se presente a las elecciones. Hay más escaños a repartir.
Habría que recordar que un Estado de Derecho es aquel en el que se cumplen las leyes, aprobadas de forma democrática. Y no aquel en el que se funciona con juicios de intenciones y suposiciones.
Puestos a suponer, supongamos que se legaliza a Sortu y que, posteriormente, se encuentran vinculaciones entre este partido y ETA; la ley es muy clara, se les ilegaliza, y punto.
Todo se puede defender, sin violencia. La policía debe seguir persiguiendo a los terroristas, no tengo la menor duda, pero no se puede ir poniendo obstáculos constantemente, y dejar fuera de un proceso democrático a una parte importante del electorado, por cuestiones al margen de la ley. Eso no vale, ¿o es que las leyes se cumplen sólo cuando interesan?
Sortu debe ser legalizado. Y ETA, mientras no entregue las armas, perseguida. Todo lo demás responde a intereses espurios que se apartan del Estado de Derecho.
Salud y República
P.D. Un brillante artículo de Javier Pérez Royo, catedrático de derecho constitucional y persona muy cercano al PSOE, defiende la tesis de la legalización con razones contundentes.