Continuamos con nuestro tercer día y como decíamos, nos dirigimos hacia Cherokee, desde donde iremos a nuestra siguiente parada, las Mingo Falls. No llevaban mucha agua cuando yo las vi, pero aún así es una excursioncilla que merece la pena, 0,4 millas de ida (cuesta arriba eso sí) y las mismas de vuelta.
Mingo Falls
Bueno, volvemos a lo nuestro, la Blue Ridge Parkway y sus paisajes idílicos.
Autorretrato en una parada :)
Nuestra primera parada es, además de los mirados, para hacer la senda, por llamarla algo, hasta el Waterrock Knob Summit. Son un total de 1,2 millas entre ida y vuelta, pero con perdón, son 1,2 millas bien jodidas. La ida es todo subiendo y no precisamente por un camino liso, sino por rocas. El día que lo hicimos nosotros, para añadir emoción al asunto, teníamos además un pequeño riachuelillo que bajaba por allí y que las hacía resbaladizas. Vamos, que se puede hacer, pero hay que ir con ganas y sabiendo lo que hay (no digo ya nada del viento conforme subes)
Subiendo hacia el Waterrock Knob
Subiendo hacia el Waterrock Knob
Vista en la cima del Waterrock Knob
Y con este palizón, finalizamos nuestro día en Asheville, donde retomamos fuerzas para seguir mañana recorriendo esta preciosa carretera escénica.