Anuncié en mi blog que me postulaba como candidato, la reacción de la mayor parte de mis lectores y de la gente a la que me he dirigido para explicárselo ha sido muy positiva. No me esperaba realmente muchas de las palabras que me han dirigido, comentarios y consejos. Ha habido alguno negativo, que acepto como los comentarios positivos más trabajados, porqué de las críticas (por muy duras que sean) se puede aprender.
Visto que la gente de mi entorno y la gente que me conoce (presencial o virtualmente) me daba inputs positivos decidí apretar para poder salir. Hice lo que no sé si se acostumbra a hacer, hablar con los primeros secretarios de la mayor parte de agrupaciones de Barcelona para explicarles que me presento, hablar con personas de mi entorno que están en contacto con diversas sensibilidades del PSC y sobretodo comentarlo a amigos y compañeros del PSC de Barcelona que me conocen y que aunque no decidan sí que quería contar con sus simpatías. Y claro, evidentemente pedirle a mis compañeros de la agrupación de Horta que me quería presentar y que me apoyaran.
Definitivamente el esfuerzo de mi agrupación, el apoyo de mucha gente y la voces positivas de la gente que me ha querido empujar, y que al final creo que inspiro alguna confianza a Jordi Hereu y a Carles Martí, primer secretario del PSC de BCN, al final, ha cuajado en que estoy en las listas.
Y para ser un puesto de relleno está muy bien, el número 26 es un muy buen número cuando tu objetivo inmediato no es ser regidor. Es evidente que estoy contento, pero sobretodo agradecido porqué soy consciente que soy candidato gracias a mucha gente.
Ahora comienza la precampaña, y como me dejó Antoni Gutiérrez-Rubi en mi blog, he de asumirla como si fueran listas abiertas y tuviera que ganarme el apoyo individual dentro de la lista para salir, aunque me gusta más la idea de Jordina de #quesalgahastael26. ¿Porqué no?
Algo he aprendido de comunicación política es que a veces hay que plantearse utopías e imposibles para conseguir los posibles. ¿Porqué no podemos soñar con 26 regidores? ¿porqué no imaginarme que puedo plantear una campaña personal que termine arrastrando al resto de mis compañeros de lista a mover todo su entorno personal, un movimiento que impulse la candidatura del PSC liderada por Jordi Hereu y conseguir un movimiento más allá de los votantes habituales del PSC que termine llevándonos a los 26 regidores?
Si una buena persona como Jordi Hereu puede ser cabeza de lista y alcalde, ¿porqué un tipo como yo no podría llegar a ser regidor?
Como candidato tengo mucho que hacer, un compromiso personal con los que me apoyen, un compromiso con el programa y el proyecto que representamos la lista del PSC de Barcelona, y un esfuerzo de cara a la campaña.
Ahora toca trabajar para #quesalgahastael26