'Soy infiel, ¿y tu?', o cómo hacer público lo privado

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Cuando te presentan un libro con este nombre, piensas, o al menos este ha sido mi caso, que será un libro sobre la infidelidad de una manera reflexiva, pero no en un tono tan cotidiano como el que podemos vivir al hablar con los amigos o al escuchar la conversación de dos personas en el autobús. Cuando esperas algo que luego no te ofrecen, quedas un poco decepcionado.

Y esto es lo que me ha sucedido al leer “Te quiero… pero me acuesto con otros. Soy infiel ¿y tú?”. Te presentan un formato habitual ya en otros, historias diferentes e independientes que están hiladas por el autor del libro, un autor que aparece más bien poco, al considerarse primordial las historias que se cuentan. Todas ellas de mujeres que fueron infieles a sus parejas o siguen siéndolo.

Como si se tratase de uno de estos programas de viajeros de la televisión, te presentan a la protagonista: nombre, edad, profesión, tiempo que lleva con su pareja y si tiene hijos o no. Al lado aparece un recuadro de fotografía, pero está vacío, la protagonista se esconde bajo su historia, si tuviese que dar la cara posiblemente no lo contaría.

Un libro te tiene que aportar algo al leerlo, pues bien, sí, este te aporta: historias de gente desconocida que han engañado a sus parejas y que lo cuentan en un tono positivo. Esto ya es cuestión de gustos, te puede parecer bien o mal, ahí ya no me meto. Lo que sí que pienso es que, para ahondar en el tema de la infidelidad quizás no sea necesario conocer casos y casos de personas infieles, quizás, sería más interesante profundizar en un solo caso, las causas que le han llevado a ello, si está bien visto o no, si en su entorno lo conocen, cómo serían las posibles reacciones de la pareja,… A lo mejor este no era el objetivo de la autora, quizás solo quería plasmar diferentes (en realidad todas muy parecidas) historias que podemos encontrar en el día a día.

Simplemente me parece algo muy morboso, porque lo es, pero que aporta muy poco, que terminas de leerlo y no tienes un sentimiento, ni bueno ni malo, simplemente te sientes quizás como un psicólogo, escuchas historias e historias pero no consigues sacarles un trasfondo.

Cuando algo no te inspira, no te mueve nada por dentro, no sabes hacer otra cosa que quedarte callado, pensando en que algo tiene que haber, que tú no lo habrás encontrado, pero por más que buscas no encuentras, no te ha gustado, no sacas nada de ello, no pasa nada, en otra ocasión será.

Ana Bueno