Si bien cuando escuchamos hablar de alzheimer siempre se asocia con personas mayores, cada día aparecen más casos de alzheimer prematuro en personas adultas que por diferentes motivos comienzan a padecer todos los inconvenientes de esta enfermedad.
El alzheimer es una enfermedad degenerativa que se da en el sistema neurológico de la persona y que afecta a toda la función cognitiva en general. La persona que lo sufre comienza a tener problemas de memoria, y poco a poco va sufriendo de problemas de movimiento y coordinación en sus tareas diarias.
Quienes hayan tenido a un familiar cercano con alzheimer saben lo difícil que es ver a un ser querido que poco a poco se va apagando y dejando de ser ellos mismos y sobre todo, la posibilidad de que ya no sepa reconocer a personas cercanas ni recordar sus nombres o la relación que los une, es por eso que si bien quien padece de alzheimer es el que más sufre en las primeras etapas, el entorno es quien va siendo testigo de estos cambios pudiendo ser muy difícil de aceptarlo en muchos casos.
Por el momento los estudios marcan que las causas posibles de sufrir alzheimer se basan en la aparición de las placas seniles que van provocando la muerte cerebral y en la formación de unos ovillos de neurofibrillas que se da en el hipotálamo.
Dentro del alzheimer encontramos el tipo de alzheimer familiar que como puedes imaginar se da en aquellos que tienen algún tipo de registro en familiares cercanos que ya lo han padecido, el alzheimer con síndrome de Down y el alzheimer por la edad, siendo este último quizás el más frecuente.