Revista Libros
Soy consciente de que en muchas ocasiones ha habido féminas que han creído que era negro al comprobar la longitud de cierta parte de mi anatomía. Alguna, incluso, me ha llegado a confundir con miembros, documentados por ella en fotos, de la tribu Mandinga de Burundi.
Puede que mis posibles raíces africanas me hayan otorgado un don, pero yo hoy quiero hablar de otra parte de mi ser, soy un "escritorcillo" a sueldo.
Lo digo en voz baja y sin que se me escuche, no por vergüenza, sino por números. No tengo ningún libro publicado y cobro poco.
Me desvío del tema, yo quería comentaros que soy negro, negro de los que escriben.
Escritores famosos de la Historia han usado a los escritores pagados por ellos para que les hicieran los libros y ellos se limitaban a firmarlos y gastar la pasta generada de su venta.
Ha habido casos célebres en la antigüedad (relativos a escritores famosos y reconocidos como Lope de Vega) y alguno en la actualidad como el de la llenapenas de las mañanas televisivas, la reputadísima profesional y gran persona, Ana Rosa Quintana.
Se sospechan de otros casos, suelen coincidir con esos que escriben como churros y la coherencia te lleva a pensar que si realmente escribieran todo eso no vivirían. No tendrían tiempo ni para desayunar, no tendrían vida.
Tienen su éxito, ha llegado su ola, y no se quieren bajar de ella. ¡Chapó!
De todas formas este es un tema que me la trae floja ya que como todavía no tengo un "hijo" que defender frente a los cainistas escritores no tengo enemigos reseñables. Espero quemarme un poco más en esa "hoguera de las vanidades", sería buena señal.
Bien, a pesar de que no tenga libros en solitario publicados, soy un escritor negro.Escribo textos por encargo, me pagan por ello.
Alguno pensará que vaya suerte que tengo que me pagan por escribir. Bueno, si y no. Está bien porque cobras algo, está mal porque es una mierda.
Tienes encargos de tipos que no hacen más que poner requisitos estúpidos para que hagas textos de 300 o 500 palabras para blogs y por ello te pagan un precio por palabra. Te provocan que parafrasees.
He escrito para webs muy famosas, de todo tipo.
Han contado con mis servicios páginas de bicicletas, viajes, alquiler de coches...
Me han pedido trabajos sobre entregas de premios, nominaciones a los Oscars, causas y tratamientos de la impotencia, críticas de cine, semanas literarias, eventos deportivos, etc...
Seguro que habéis leído alguna web (de esas de gran aceptación) donde hay un texto mio.
Es curioso este rol de "negro" del 2013. Se subarriendan los trabajos que no quieren hacer los que tienes pelas y lo ofrecen por poco dinero. No está mal, un dinerito es...
Yo de todas formas espero que mi experiencia como profesional en este campo me lleve a trabajar con los grandes del panorama literario actual, incluso si me llama alguna ex-ministra la cogería en teléfono.
Este post de hoy quería buscar dos cosas: compartir con vosotros que escribo por encargo (soy discreto, si alguien quiere contratar mis servicios sabes que puede enviarme un email) y desmentir que sea negro natural, ya que tanto negarlo las noches de sábados me ha hecho empezar a dudar si mis genes venían de aquella zona.
También pongo eso de que "cobro por escribir" porque parece que todas las propuestas que te hacen las webs literarias o editoriales, hoy en día, son para que trabajes gratis mientras ellos se llevan los beneficios de la publicidad prometiéndote que cuando haya ingresos cobrarás.
Si les dices que "no trabajas gratis" se enfadan e incluso algunos te borran de sus contactos, acto que me tiene varios días llorando, con el klinnex en la mano y sin poder dormir.
A todos estos gilipollas que te ofrecen currar gratis, a todos esos que te ofrecen que malgastes tu tiempo colaborando en proyectos literarios donde solo firma el cerebro "padre de la idea", a todos los aprovechados en general, quiero deciros con cariño y respeto que os den por donde amargan los pepinos.
Probad a que el mecánico del taller, el carnicero, el taxista os ofrezcan sus trabajos gratis. Los escritores, ilustradores, creadores en general, no somos diferentes.
¡Plantaros y conservad la dignidad!. Es mejor cobrar poco que no cobrar. ¡Matad esos pajaritos que están el aire puestos por los caraduras!