Soy Steven Gerrard y esta es... mi ciudad

Liverpool 3-0 Everton
No hay nada mejor que un derby de Merseyside. No hay nada mejor que ver Anfield cantando YNWA. No hay nada mejor que ver los colores vecinos azules entremezclándose amistosamente con el rojo Scouser. No hay nada mejor que un partido declarado oficialmente "explosivo e indisciplinado" acabe sin expulsiones. No hay nada mejor que un Liverpool-Everton.
Pero lo que está claro, es que no hay nada mejor que ver a un jugador legendario haciendo un hat-trick que pasará a los anales en un derby de la ciudad. Steven Gerrard ha decidido por si mismo que hoy era el día perfecto para jugar su partido perfecto. El Hat-trick del capitán red tiene pinta de que estará presente en la ciudad de Liverpool como mínimo hasta la temporada que viene.

Y eso que el Everton no ha hecho un mal partido. Ambos equipos llegaban en situaciones muy diferentes. El Everton de ganar a los Spurs en Goodison Park con un solitario gol de su delantero recién llegado Jelavic y que por sorpresa no se encontraba en el once inicial de David Moyes. En su lugar, el hombre del décimo aniversario al frente del banquillo del Everton decidió apostar por Stracqualursi y Anichebe como hombres de referencia ofensiva. Ni Cahill, ni Jelavic, ni Osman aparecían en una alineación un tanto arriesgada. 
En cambio, el Liverpool afrontaba este partido tras caer derrotado en el campo del Sunderland y alejarse aún más si cabe de zonas europeas. Pero el bueno de Kenny apostaba el todo por el todo, poniendo en su centro del campo a Henderson-Spearing-Downing-Gerrard y con su delantera de éxito Suárez-Carroll. 

Así, en una primera parte donde un desacertado Suárez hacía lo más difícil para que Howard se luciera, las ocasiones y el control del esférico fue un tanto equitativo, no habiendo un dominador claro pero sí teniendo las alternativas en el juego ambos. De este modo, en el 34', Gerrard abriría su cuenta particular aprovechando un rechace de la defensa Toffee para elevar por encima de defensores y guardameta la pelota en una vaselina de precisión perfecta. Era el 1-0 y Anfield se rendía a los pies del Capitán.
En la segunda parte, el juego siguió en su línea equitativa, pero en el 51' una jugada personal de Suárez dentro del área, fue el precedente perfecto para que de nuevo el capitán red fusilara la portería de sus vecinos en el partido número 400 del gran Steve G. Moyes introdujo un triple cambio para intentar remontar el encuentro. La solución se encontraba en Jelavic, Osman y Drenthe, en una clara apuesta por una ofensiva total sobre la portería de Reina.

Con este triple cambio, la tónica del encuentro cambió y el dominio fue un tanto más claro para el Everton que tenía constantemente la pelota pero sin encontrar la fortuna frente a Pepe Reina. Finalizando el encuentro, en el minuto 92', Gerrard firmaría su hat-trick y terminaría de rematar a un Everton que no merecía tanto castigo. 

El Liverpool se sitúa a siete puntos del Chelsea que marca la zona europea y el Everton continúa en una zona cómoda de media tabla.
Javier Martínez (@JaviMartinez82)