“Casino Royale” en 2006 significo un cambio de enormes proporciones para la franquicia de James Bond, pues la película tuvo un realismo que no se había visto en ninguna de las anteriores del 007: un Bond letal y frio al momento de asesinar, mujeres mucho más inteligentes e independientes, casos más realistas; “Casino Royale” fue sin lugar a dudas una película que pareciera que cambiaria las cosas alrededor de la franquicia.
Pero conforme las secuelas fueron pasando, el Bond/Craig poco a poco se había vuelto a meter a los viejos territorios que Connery, Lazenby, Moore, Dalton y Brosnan recorrieron en sus épocas. Poco a poco esos puntos que no entraron en “Casino Royale” se fueron presentando en “Quantum of Solace” y “Skyfall”, provocando opiniones divididas: los fans amaron volver poco a poco a esos elementos tan icónicos en la franquicia, mientras que otros, que se estrenaron con Craig (o que quedaron fascinados con su entrada la franquicia), como que detestaron varios de esos detalles. Con ese panorama en contra o a favor, “Spectre” llega para dividir aun más las aguas entre el público: hay quienes acabaron rendidos ante la película, pero hay quienes terminaron casi odiando lo que Sam Mendes presento en la gran pantalla.
Es difícil de saber por dónde empezar en esta película, pero creo que empezare con los aspectos positivos y lo primero que destaco son las actuaciones: para esta entrega del 007, nos encontramos quizá ante un enorme casting que desborda carisma a pesar de lo limitados que están sus personajes: Craig sigue demostrando que esta mas que completo para el papen de Bond, con un poco mas de humor muy al estilo de Connery; Christoph Waltz se siente desaprovechado pero aun saca a flote su talento para destacar como el villano de la película; Ralph Fiennes, Ben Wishaw y Naomie Harris como M, Q y Moneypenny lucen bastante sólidos en sus escenas; y Lea Seydoux demuestra ser una buena chica Bond. También destaco aquí a Dave Bautista (Batista, ex luchador de la WWE) como Hinx, el asesino en turno de la película: es brutal, es callado y con él no se puede jugar sin salir lastimado.
La acción es bastante notable a mi parecer: cuando supe que habían grabado escenas en México (pagadas por el gobierno aparentemente), temía que fuese a ser una escena mal hecha, solo para atraer al público mexicano; y el resultado fue no solo una de las mejores escenas de toda la película, sino más bien una de las mejores escenas de toda la franquicia, haciendo una toma larga increíble apenas comenzando. El resto de la acción no está mal tampoco: la pelea en el tren entre Bond y Hinx es intensa, así como la escena en las montanas; y la pelea en el desierto del Sahara es intensa.
Pero no todo lo que brilla es oro en esta entrega de James Bond. Aunque tiene un buen casting, la película comete un par de pecados: el primero es no darle un trato del todo bueno a los nuevos personajes, salvo a Bautista; Waltz logra sobresalir, pero más a su talento que al trato a su personaje que queda bastante a deber y Seydoux es solo un adorno para Craig; y el segundo pecado es el increíble desperdicio de Monica Bellucci. Voy a confesar que antes del 2015 mi conocimiento sobre el agente 007 y su enorme franquicia me era desconocida, pero al momento de saber Bellucci estaría aquí, fue cuando me decidí a ver todas las películas; y saber que todo lo visto fue solo para un cameo de 5 minutos (o menos) me parece insultante, para la enorme figura de la actriz.
La acción en un principio está bien, pero conforme avanza como que va perdiendo lógica (no fuerza), especialmente en sus últimos minutos, cuando la saga literalmente se adentra en terrenos dignos de la era Roger Moore.
Pero en donde la película en verdad presenta sus fallas en con la historia, que es muy entretenida, pero hace huecos por doquier. Donde radican los problemas es con Spectre. La organización criminal enemiga de Bond por excelencia aunque tiene un plan bastante interesante, falla en su ejecución de manera tan lamentable, que uno se pregunta cómo es que Bond batallo tanto para poder detenerlos. Las conexiones que tratan de hacer con las películas anteriores también fallan; y la idea de emparentar a Bond con el líder de la organización no es mala, pero no siento que este del todo aprovechada.
No es mala “Spectre”, de hecho diría que es bastante recomendable (mas de lo que fue “Quantum of Solace” o incluso “Skyfall”), pero en verdad le hacía falta una repasada al guion, que por momentos quiere bordear lo ridículo, y eso afecta mucho la opinión; al final, no deja de ser una buena opción en la gran pantalla.