Aunque el primer número de la nueva serie de Spider-Woman me pareció mediocre y es que, ¡era un primer número, tenía que ser más espectacular! el segundo es un poco más de lo mismo pero tiene bases más solidas para avanzar de manera interesante Spider-Verse. Es más una historia que juega al misterio y aprovecha mejor el carisma de Jessica Drew. Bajo los lápices de Greg Land hay un mar de curvas y explosiones de sensualidad. El artista hace lo suyo entregando una Spider-Woman más sexy que de costumbre.
SPOILERS
La gran diferencia entre el número anterior y este, es que Spider-Woman si se roba el protagonismo de su serie. Esta Silk pero no le roba tanta cámara. Aquí Dennis Hopeless se carga al misterio, espionaje, intriga y todos aspectos que en un comic se agradecen cuando se usan bien. El escritor toma otro tipo de recursos para hacer sobresalir a su protagonista (gran parte el arte de su dibujante).
El argumento está bien apegado a Spider-Verse y para gracia de nosotros avanza en la historia: tenemos la situación de Silk y el último descubrimiento que hace, a una infiltrada en la tierra del enemigo y sobre todo el “romance” entre araña y cazador, Morlun ySpider-Woman dándose un beso, vaya que fue impresionante verlo.
No es tan de mi agrado el ambiente creado para la historia con toda esta desubicación y una tierra con barcos intentando jugar al pirata… pero funciona, que es lo más importante al final de cuentas.
Greg Land hace un trabajo bueno a mis ojos; si, ahí están sus claras referencias sexuales y las poses bien marcadas, así como las curvas, pero logra elevar al personaje. Desde hace tiempo Spider-Woman se veía perdida, sobre todo con la introducción de Silk y Spider-Gwen. En este comic le vemos madura, decidida, más firme, y aceptando el rol de mujer mayor. Muy rescatable ese punto ya que tanto ella como Peter (el original) sirven de guías para el resto de la manada.
El primer tercio del comic se siente lento pero a partir del segundo inicia una aventura al estilo Hollywood.
Spider-Woman 2 mejora con respecto a su antecesor y establece una buena continuación al evento. Greg Land entiende mejor al personaje y saca lo mejor de ella. Ahora si nos deja “picados” y esperando el numero siguiente.