Los realizadores criticaron la falta de ideas innovadoras en una conferencia universitaria
Las leyendas ya lo están sufriendo en sus propias carnes. Steven Spielberg y George Lucas se mostraron muy cabreados ante la situación actual que está viviendo el cine en una conferencia para los alumnos de la USC. Ambos directores lanzaron una dura crítica a la falta de ideas renovadoras en el sector y mencionaron una cuestión que circula por las entrañas de la industria pero sobre la que nadie se atreve a hablar en voz alta, y es que la estrategia se dirige a una jugada en la que los precios de las entradas se relativizarán en función del presupuesto de la cinta. "Vas a pagar 25 dólares por la próxima de Iron Man, pero solo 7 por ver Lincoln", explicó Spielberg, quien aseguró que su biopic sobre el presidente de los EEUU estuvo "a esto de convertirse en un film para la HBO. Que le pregunten a la cadena". Por su parte Lucas mencionó que apenas pudieron colar Lincoln y Red Tails en cines. "Nosotros, Steven Spielberg y George Lucas, no podemos meter
nuestras películas en el circuito cinematográfico".
Tras el salto, sus desalentadoras declaraciones completas.
Asimismo, ambos cineastas se refirieron al "momento de revolucion" en el que se halla el sector. "Algunas ideas de jóvenes realizadores son demasiado extremas (...) Ése es el gran peligro y al final va a haber o una gran implosión o todo se va a caer, en el momento en el que tres, cuatro o media docena de películas de gran presupuesto se estrellen. Eso es lo que va a cambiar el paradigma". Spielberg prosiguió el simposio expresando que "es un desastre. Caos total, pero de ese caos van a salir cosas
asombrosas y ahora mismo hay oportunidades extraordinarias para los
jóvenes que llegan a la industria para decir: 'Ey, voy a hacer esto y
nadie podrá detenerme'".
Continuando con el vaticinio, Lucas declaró que "al final vamos a tener menos cines. Más grandes, con cosas muy bonitas. Pero van a costar 50, 100, quizás 150 pavos. En eso va a quedar el negocio de las películas. Los demás irán a la televisión por cable o a TiVo".
En otro orden de cosas, Lucas y Spielberg hablaron sobre las enormes diferencias entre cine y videojuegos y la razón por la cual en los últimos años no han sido capaces de contar historias y conseguir que los consumidores se preocupen por los personajes. Así, Lucas señaló que "contar una historia es un proceso muy complicado. Guías a la audiencia, enseñas cosas. Es una construcción muy complicada. Si permites que la gente entre y hagan lo que quieran ya no es una historia. Simplemente es un juego. Los juegos tienen cada vez más trama, pero no una que digas… ya sabes… no va a ser Shakespeare" ha dicho el hombre que un día poseyó Lucas Arts, de donde surgieron aventuras jugables canónicas como Monkey Island o Indiana Jones y la última Cruzada.
Por el momento, tanto Spielberg, que se encuentra preparando American Sniper con Bradley Cooper, como Lucas, dedicado ahora a la vida como productor, están aguantando el tipo antes del inminente apocalipsis en Hollywood.
/Vía THR