Por STAN CHOE y TALI ARBEL | La Prensa Asociada
NUEVA YORK (AP) – T-Mobile y Sprint alcanzaron el domingo un acuerdo de fusión de 26.500 millones de dólares que reduciría la industria inalámbrica de los Estados Unidos a tres actores principales, es decir, si los reguladores antimonopolio de la administración Trump dejan pasar el acuerdo.
Las compañías inalámbricas tercera y cuarta más grandes de la nación han estado considerando una combinación durante años, una que los engrosa hasta un tamaño similar al de los gigantes de la industria Verizon y AT & T. Pero un intento de 2014 se vino abajo en medio de la resistencia de la administración Obama.
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Los consumidores temen que un campo de telecomunicaciones menos concurrido pueda generar precios más altos, mientras que los sindicatos de trabajadores están preocupados por posibles pérdidas de empleos.
En una conferencia telefónica con analistas de Wall Street, el CEO de Sprint Marcelo Claure reconoció que obtener la aprobación regulatoria es “el elefante en la habitación” y una de las primeras cosas que hicieron las compañías después de enviar el comunicado de prensa fue llamar a Ajit Pai, presidente de la Comisión Federal de Comunicaciones.
Las compañías enfatizaron que planean tener más empleados siguiendo la combinación, particularmente en áreas rurales, que ahora como compañías independientes.
También enfatizaron que el acuerdo ayudaría a acelerar el desarrollo de redes inalámbricas 5G más veloces y garantizaría que Estados Unidos no ceda el liderazgo de la tecnología a China.
Y dijeron que la combinación les permitiría competir mejor no solo con AT & T y Verizon, sino también con Comcast y otros, a medida que las industrias inalámbricas, de banda ancha y de video convergen.
“Este no es un caso de pasar de 4 a 3 compañías inalámbricas: ahora hay al menos 7 u 8 grandes competidores en este mercado convergente”, dijo el presidente ejecutivo de T-Mobile, John Legere, en un comunicado.
Él sería el CEO de la compañía combinada, que se llamaría T-Mobile.
El acuerdo de acciones valora cada acción de Sprint en un poco más de 0,10 acciones de T-Mobile. Deutsche Telekom, la matriz de T-Mobile, sería propietaria de aproximadamente el 42 por ciento de la compañía combinada. SoftBank de Japón, que controla Sprint, sería dueño de 27 por ciento, y el resto sería propiedad del público.
Las compañías dijeron que esperan que el acuerdo se cierre en la primera mitad de 2019 y resultará en un ahorro anual de alrededor de $ 6 mil millones.
Los inversores han estado anticipando un trato como este por algún tiempo. Además del frustrado intento de hace tres años, las dos compañías estaban listas para combinar en octubre, pero el acuerdo fue cancelado después de que los analistas dijeron que había un desacuerdo sobre el control de la compañía combinada.
El acuerdo tendrá que ser revisado por el Departamento de Justicia y la FCC.
Los transportistas nacionales no habían podido llegar a un acuerdo con el presidente Barack Obama. Pero la FCC en septiembre consideró que el mercado inalámbrico era “competitivo” por primera vez desde 2009, lo que según algunos analistas podría facilitar la presentación de un acuerdo.
Las aspiraciones de 5G están en el corazón del acuerdo, y la nueva tecnología podría permitir a las compañías brindar un servicio más rápido a los hogares de las personas.
Sprint’s Claure comparó pasar de 4G a 5G a cambiar de televisión en blanco y negro a color. La compañía combinada planea invertir hasta $ 40 mil millones en su red en los primeros tres años, lo que según los ejecutivos impulsaría más contrataciones y un mejor servicio para los clientes.
Sprint tiene muchas deudas y ha registrado una serie de pérdidas anuales. Ha reducido los costos y se ha hecho más atractivo para los clientes, dijo el analista de BTIG Research Walter Piecyk, pero no ha invertido lo suficiente en su red y no tiene suficientes derechos de ondas aéreas para un servicio de calidad en áreas rurales.
T-Mobile, mientras tanto, ha estado en una racha de clientes adicionales durante un año. Después de que el gobierno rechazara el intento de AT & T de comprar la compañía en 2011, T-Mobile abrió el camino en muchos cambios favorables al consumidor, como abandonar los contratos de dos años y traer de vuelta planes de datos ilimitados.
Los consumidores están pagando menos por el servicio de teléfono celular gracias a la influencia de T-Mobile en la industria y las guerras de precios resultantes.
Verizon y AT & T han estado expandiendo sus negocios de contenido de video, mientras que las compañías de cable se han estado moviendo hacia lo inalámbrico. Eso permite que una sola compañía combine Internet doméstica e inalámbrica y use contenido para apoyar a las empresas de comunicaciones.
Comcast, el gigante del cable que terminó de comprar NBCUniversal en 2013, ofrece a sus clientes servicios inalámbricos mediante la reventa de acceso a la red de Verizon. También lo hace otra compañía de cable dominante, Charter.
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https://www.mercurynews.com/2018/04/29/sprint-and-t-mobile-agree-to-merge-in-26-5-billion-deal/
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