Stevland Hardaway Morris, conocido artísticamente como Efectivie Wonder Stevie Wonder, es un farsante que ha triunfado en el mundo de la música a base de dar penita por su ceguera. Sin embargo, todo es un cuento chino y no es ciego, ni canta y ni tan siquiera sabe tocar el piano.
La historia oficial dice que nació prematuro y no llegó a desarrollar las retinas. Una historia absurda que todo el mundo se tragó.
Cuando tenía 11 años, Berry Gordy, el patrón de la legendaria discográfica Motown quiso crear un artista de él porque se tiraba a su madre.
Como no sabía hacer nada, ni cantar ni tocar nada, le puso la voz de un niño cantante y un pianista para hacer creer que era él quien interpretaba los temas. Pero no logró que el niño triunfase.
Un día decidió recurrir a algún gancho. Probó muchas cosas. Un día se le ocurrió lo de la ceguera cuando vino a la oficina de la Motown con gafas de Sol.
La historia conmovió y se salieron con la suya. Fue sumando números uno
Por finales de los 70, Stevie dejó de ser un niño, así que la Motown tuvo que cambiar de planes, ya que la voz de niño no casaba con su imagen adolescente.
A aquel niño lo quisieron despedir sin más. Aquello lo cabreó y quiso hacer chantaje a la discográfica, así que enviaron a unos matones y mataron a golpes al niño y metieron su cadáver en una caja de cartón abandonándolo en una playa. La policía encontró aquello, pero como era negro cerraron el caso como un suicidio.
Mientras tanto, Stevie seguía triunfando con la voz de otro cantante de su misma edad. Hoy en día ese cantante se lleva el 45% de los ingresos de Stevie y calla, pero ya está muy mayor y quiere retirarse, así que Stevie también se vio obligado a ello, ya que a estas alturas, buscarse a otro podía suponer el descubrimiento del pastel.
Este engaño ha sido revelado en varias ocasiones y silenciadas.
Boy George puso en duda en una entrevista donde aseguró que Wonder lo localizó en una habitación y, bromeando, hizo como que lo estrangulaba.
Durante una actuación celebrada en 2010 en la Casa Blanca vemos cómo varios artistas y algún espontáneo cantan el estribillo de 'Hey Jude', Paul McCartney empuja un micro cuando se dirige al piano y, con los reflejos de Dare Devil, Wonder lo agarra al instante impidiendo que caiga al suelo. Otra persona lo toma de su mano y la actuación continúa sin que nadie parezca darse cuenta. Sin embargo, nosotros sí.
Por si fuera poco, compró algunos aviones y los pilotee. Una vez pilotó un avión. En verdad fueron dos veces. De hecho los aterrizó.
Con el paso del tiempo y la vejez, ha ido cometiendo errores y dejando al descubierto la farsa, por lo que se mudó a Ghana. Que ese país sea un paraiso fiscal debe ser coincidencia.
Quizá este año revele la verdad sobre su ceguera.