
[Ricardo Portmán] @ecosdelviniloUno de los llamados a resurgir de sus cenizas era precisamente Sting, un incombustible que se mantiene con una salud envidiable y conserva la buena cabeza como para aceptar que sus discos de música no comercial no hacían justicia a su historial y que es en el rock donde radica su poderío. El álbum 57h & 9th ha sido recibido como una bocanada de aire fresco; sin ser una obra capital de su carrera solista ha cumplido con recuperar la mejor versión de Sting.
El británico trajo su 57h & 9th Tour al Hard Rock Hotel de Punta Cana (es su tercera visita a Dominicana), acompañado por su fiel escudero Dominic Miller y nada menos que su hijo Joe -aquel que en la ficción televisiva del sitcom Friends no se llevaba bien con el hijo de Ross Geller- que hace sus pinitos en la música siguiendo los pasos paternos.Del telonero elegido (Pavel Núñez) poco hay que decir salvo que esta no era la ocasión para su propuesta, más afín para abrirle a otro tipo de exponentes, porque si era por elegir un acto local de apertura seguro habría funcionado mucho mejor Diego Mena o Auro Sónico.
