A mi padre,
Cuando todos se han ido y quedamos solos mi padre y yo en el comedor familiar, este me recuerda un suceso que hace muchos años tuvo lugar justo donde yazco sentado, y entonces saca de un cajón una vieja baraja con las anotaciones sin tinta de mi abuelo.
Las leemos juntos y comprendo por qué se enfadó con él tanto aquel día.
Sueño de Navidad