Las Sugerencias generales sobre los métodos de cocción saludables incluyen:
Cocinar al vapor, al horno, en la parrilla, hervir o cocinar al microondas sus alimentos.
Modificar o eliminar las recetas que incluyen la mantequilla.
Evite el uso de aceites y la mantequilla como lubricantes. Use utensilios de cocina antiadherente en su lugar.
No agregue sal a la comida mientras se está cocinando.(sale antes)
Retire la piel del pollo, que es alta en grasa.
Coma más verduras frescas y legumbres.
Coma más pescado, que es rico en proteínas, bajo en grasas y cargados con esenciales omega-3.
Otras sugerencias para una cocina saludable incluyen:
Si tiene que utilizar el aceite, trate de hacerlo con aerosoles para cocinar o aplique el aceite con una brocha
de pastelería.
Cocine con líquidos (tales vino, jugo de limón, jugo de fruta, vinagre o agua) en lugar de aceite.
Cuando una receta requiere crema como espesante, use de yogur bajo en grasa, leche de soya baja en grasa, leche descremada evaporada o almidón de maíz.
Cuando fria las verduras, coloque estas en una sartén caliente y luego rocie con aceite, en lugar de añadir el
primer aceite en la sartén. Esto reduce la cantidad de aceite que los vegetales (como los hongos) pueden absorber durante la cocción.
Para conservar las vitaminas de las verduras que son fácilmente destruidas durante la preparación y cocción.
Debe seguir estas sugerencias:
Use verduras enteras en lugar de pelarlas, ya que muchos de sus nutrientes se encuentran cerca de la piel.
Utilizar para cocerlas el horno de Microondas o al vapor en lugar de hervirlas.
Si te gusta hervir las verduras, utilizar solo una pequeña cantidad de agua y no sobrehervirlas.
La sal es un potenciador del sabor tradicional, pero la investigación sugiere que una dieta alta en sal podría
contribuir a una serie de problemas de salud como presión arterial alta. Para evitar al maximo los efectos
perjudiciales de la sal siga estas sugerencias:
No agregue sal a sus alimentos mientras los cocina.
Añadir un chorrito de aceite de oliva o de jugo de limón hasta el final del tiempo de cocción o a sus vegetales
cocidos - puede potenciar los sabores de la misma manera que la sal.
Elija vegetales frescos o congelados, ya que las hortalizas en conserva como el vinagre tienden a ser envasados con sal.
Limite su consumo de carnes saladas procesadas como el salami, jamón, cecina de res, tocino, salmón ahumado, salchichas y pastel de pollo.
La sal yodada es la mejor. Una de las principales fuentes dietéticas de yodo son los alimentos vegetales.
Si usted come pescado con regularidad (al menos una vez a la semana), la necesidad de sal yodada se reduce.
Evite los alimentos procesados cargados de sal, como la pasta o fideos instantáneos con sabor, en lata o sopas deshidratadas, frutos secos y salados.
La margarina y la mantequilla contienen mucha sal, pero las variedades "sin sal agregada" están disponibles.
La mayoría de los quesos son muy altos en sal para limitar su consumo o elegir las variedades más bajo de sal.
Reduzca el uso de salsa de soja, salsa de tomate y las salsas y condimentos procesados (por ejemplo, la mayonesa y aderezos para ensaladas) porque contienen altos niveles de sal.
Utilice hierbas, especias, vinagre o jugo de limón para añadir chispa extra a su receta y reducir la necesidad de sal.
Estos sencillos consejos le harán tener una cocina saludable.