EL PLANETA DE LOS SIMIOS: (R)evolución
data: http://www.imdb.com/title/tt1318514
Para los entrados en años, “El planeta de los simios” nos evoca una escena: Charlton Heston llorando al pie de la Estatua de la Libertad en ruinas. Hace una década, Tim Burton se metió con la misma historia y logró uno de sus escasos bodriazos, una incomible versión que se salva del olvido sólo porque allí el director conoció a su actual pareja, Helena Bonham-Carter. Cuando escuchamos que volvían a atacar con esta historia, reconocemos, fruncimos el entrecejo. Y fuimos al cine con pocas expectativas. Bueno: el resultado es muy bueno. “El planeta de los simios: (R)evolución” logra establecer una estética oscura. Arroja un buen puñado de imágenes fundamentales y deja abierta la historia para lo que viene (la toma del poder por parte de los simios). Es cierto que el final afloja un poco y concede un final convencional. Pero, pese a todo, el balance es positivo.
“El planeta de los simios: (R)evolución” es la precuela que describe cómo los monos cruzaron la línea que los separa del ser humano. Un fármaco experimental para curar el Alzheimer dispara el potencial mental de los simios sujetos de experimentación. Uno de ellos, Cesar, será el líder del grupo, el simio especial que rebelará a una población de monos para volver al bosque y generar una cascada viral de monos inteligentes que, posteriormente, tomarán el control del mundo.
La historia describe el crecimiento intelectual en un contexto de sumisión. Ante la violencia de la opresión, nace el rencor. La liberación de Cesar no nace desde la luz, sino desde la revancha. Y paradigmáticamente, su primera palabra no puede ser otra que “¡No!”. Un mundo diferente hubiera nacido de otro trato a Cesar. Es el mundo posible que le ofrece Will Rodean, su creador, el científico que lo protege en su casa.
Detrás de la máscara de Cesar, el simio protagonista, está Andy Serkis (Gollum, King Kong), especialista en actuaciones capturadas digitalmente. Es el pilar indispensable para dotar a Cesar, esa creación digital, en una figura con sentimientos. Los momentos más oscuros del filme se sostienen en la verosimilitud de la máscara.
Rupert Wyatt, director del filme, ha conseguido anexar imágenes memorables al correcto guión de Rick Jaffa y Amanda Silver. La toma del puente de San Francisco, el abrazo de Cesar con Charles Rodman (excepcional John Lithgow), la lucha en la reserva en la que Cesar se impone a sus abusadores. Wyatt ha acertado en acentuar el contraste entre la humanidad naciente de Cesar con la humanidad moribunda de los seres humanos que lo rodean.
Las fallas de “El planeta de los simios: (R)evolución” hay que cargarlas en un desenlace no del todo fuerte (aunque sea coherente con la necesidad dramática del protagonista: llegar al bosque) y con una carencia en la historia de Will Rodman que no adquiere volumen. El papel de James Franco no cobra vuelo. Apenas su ímpetu por encontrar una cura para la enfermedad mental de su padre, aliciente que no está totalmente bien construido. Como agravante, el romance con la bella Freida Pintos es nulo en términos dramáticos. Por eso, el filme avanza en las escenas de la evolución personal de Cesar; se vuelve convencional, cuando aparece James Franco.
Frases:
¡No!
-Monos solos débil… Juntos fuerte.
-Monos estúpidos.
-Ven a casa.
-Cesar está en casa.