SUPERFOODS PARA CONSERVAR TU CUERPO LIMPIO, SANO Y LLENO DE NUTRIENTES
Al hacer un programa de desintoxicación o detox le permites a tu cuerpo eliminar los agentes que lo dañan por dentro, lo que se traduce en una piel radiante, sensación de ligereza y mayor energía. Después de un programa de este tipo, la idea es que empieces una dieta balanceada libre de toxinas para que los beneficios se vean multiplicados, al consumir alimentos que nutran tu cuerpo de la mejor manera.
Sin importar si has hecho o no un detox previamente, la principal interrogante aquí es: ¿cómo puedes mantener a tu organismo sano, nutrido y libre de toxinas por más tiempo? Una solución simple y deliciosa es agregar a tu dieta diaria los ya famosos súper alimentos o superfoods.
Los superfoods son productos 100% de origen natural derivados de frutas, tubérculos, raíces o hierbas que sirven como suplementos para la salud holística y que contienen más nutrientes por caloría que la mayoría de los alimentos. Éstos cuentan con altas dosis de vitaminas, minerales, antioxidantes y enzimas, que son rápidamente absorbidos y asimilados por el cuerpo.
ELIXIR Detox -marca pionera en la República Mexicana- lanza su propia línea de súper alimentos, ELIXIR Superfoods, para complementar tu alimentación post-detox y también brindarte opciones alimenticias sanas para tu vida cotidiana, evitando así que tu organismo vuelva a absorber las toxinas que tanto daño le hacen.
La línea de ELIXIR Superfoods consta de seis súper alimentos esenciales para nutrir tu cuerpo: chía, espirulina, moringa, miel de agave, hemp y polen.
Chía
La chía, además de tener el doble de proteína que cualquier otra semilla y cinco veces el calcio de la leche -entre otras tantas propiedades- provoca la sensación de estar satisfecho, reduciendo los antojos y, por lo tanto, evitando aumentar de peso. Se puede añadir al agua de uso diario, incluirla en la masa para panes o agregarla espolvoreada sobre los aderezos para ensalada.
Espirulina
El alga espirulina proporciona ocho de los 10 aminoácidos esenciales que el organismo necesita para sintetizar las proteínas ingeridas; y es más fácil de digerir que aquéllas que vienen de la carne e incluso la soya. La espirulina mejora el sistema inmunológico y la flora intestinal, reduce el colesterol y previene el cáncer, entre muchas otras ventajas. Debido a su fuerte sabor, es recomendado añadir sólo una cucharada a jugos, licuados y otro tipo de preparaciones, sin cocinarla demasiado para preservar sus propiedades.
Moringa
Es una planta con vitaminas A, C y E y bioflavonoides, los cuales retrasan el envejecimiento. Entre sus tantos beneficios, la moringa combate la anemia, regula el azúcar en la sangre, reduce el asma, la hipertensión y el colesterol, y previene la infertilidad. Es ideal para mezclarla con jugos y batidos, además de ser rica espolvoreada sobre sopas y ensaladas.
Miel de agave
Al igual que la miel de abejas, el azúcar o el jarabe de maple, la miel de agave es un endulzante natural que puede ser utilizada directamente en cualquier comida. Ésta estimula el crecimiento de la flora intestinal, contiene pocas calorías, regula los niveles de insulina, previene caries dentales y regula la actividad intestinal.
Hemp
El hemp es reconocido por la Organización Mundial de la Salud por tener los ácidos grasos esenciales del Omega 6 al Omega 3, que ayudan a la quema de grasa. Este producto es proteína 100% vegetal que ayuda al crecimiento celular, repara tejidos musculares, reduce la hiperactividad infantil, ayuda en el tratamiento de desintoxicación de alcohol y drogas, regula la ansiedad, depresión y estrés, entre otras cosas. Esta proteína de cáñamo puede servir en la elaboración de bebidas, pasteles y panes.
Polen
El polen es un antibiótico natural que, al consumirlo con regularidad, incrementa el número de glóbulos rojos que combaten la anemia y debilidad, mejora la vida sexual, regula el apetito y combate el estrés, nerviosismo, irritación, depresión post-parto, resfriados y anginas, gracias a su alto contenido de minerales y vitaminas A, B, C, D y E. Se puede mezclar de una a tres cucharadas en leche, infusiones o yogurt.