Revista Cine
Director: Todd Haynes
Todd Haynes también participa en la Selección Oficial de Cannes este año, así que se hacía necesario comentar algunas de sus películas. Iba a comenzar con "Poison", su opera prima, pero entonces me encontré con esto, un mediometraje que hizo, saquemos la cuenta, cuatro años antes, y que es toda una rareza que a estas alturas parece que se ha vuelto de culto, etiqueta que solía emocionarme pero que ahora me parece tan confiable como decir "sello de calidad Netflix". Y en todo caso los cuarenta y pico minutos que dura "Superstar: The Karen Carpenter Story" son ideales para estos fines de semana en donde no se puede estar más de una hora sin verse abrumado por los putos ruidos de la gente "descansando".
Fanáticos o no, me parece que todos habremos oído alguna vez el nombre de Karen Carpenter, o, de no ser el caso, estoy seguro de que todos habremos escuchado, alguna vez, alguna de las canciones de Carpenters, que es la banda que la susodicha formó con su hermano a fines de los sesenta, alcanzando gran éxito en Estados Unidos, el cual se prolongó prácticamente durante toda la década siguiente. Sin embargo, el '83 Karen Carpenter murió de complicaciones cardíacas debido a su anorexia. Cuatro años después, Todd Haynes dirige esta extraña historia que no es un documental propiamente tal ni tampoco exactamente ficción, quizás una versión estrictamente personal de acontecimientos no del todo claros. "Superstar" comienza con la muerte de Karen Carpenter, hecho desde el cual el relato plantea la siguiente pregunta: ¿qué fue lo que condujo a la célebre cantante y baterista a la muerte? Lo que sigue son cuarenta minutos en donde se repasan acontecimientos cruciales en la vida pública y privada de la mentada figura retratados bajo el punto de vista de Haynes, el cual abarca desde los círculos familiares y profesionales de la protagonista hasta la sociedad estadounidense de aquel entonces, planteando como tesis que uno de los factores principales de la anorexia de Carpenter, la cual provocó el deterioro de salud que la llevó a la muerte (además del uso de laxantes y medicamentos que inducen al vómito), fue la excesiva presión que recayó desde múltiples lados sobre sus hombros: la presión para respetar contratos, para ganar dinero, para sostener el éxito, para respetar la imagen de niña buena (parte del éxito, señala el mediometraje, es que la calma e inocencia de la música de Carpenters contrastaba con la tumultuosa época de hippies, drogas, hard rock, Guerra de Vietnam, etc.), para tener una imagen de mujer delgada y bella acorde a su fama, entre otras tantas presiones que debe soportar una celebridad femenina. Entonces lo que Haynes hace es contrastar esta imagen pura que se tenía de Karen Carpenter con su atormentada vida interior provocada por agentes externos, explicitando las consecuencias que causan los fenómenos sociales o mediáticos tratados a lo largo del metraje.
La gracia extra de "Superstar" es que las escenas, mayormente, son representadas por muñecas Barbie, irónico gesto que alude a la distorsionada percepción de cuerpos propios y ajenos que puede causar el perfecto e irreal modelo de belleza de estas muñecas, finalmente conduciendo a inseguridades y miedos y problemas aún más graves.
Independientemente de cuán fidedigno sean los acontecimientos retratados (la familia no estuvo muy contenta con este mediometraje, pues no sale muy bien parada que digamos), "Superstar: The Karen Carpenter Story" es una muy interesante y aguda mirada a la vida y muerte de una importante figura en la escena musical estadounidense. ¿De culto? Quién soy yo para dictar tendencias... Pero sí que merece la pena el visionado, al menos como curiosidad...