Revista Coaching

Supervivientes en la oficina: no siempre el malo es el jefe

Por Iñaki González @goroji

zona de confortEl otro día hablábamos de jefes tóxicos, líderes caducos, anclados en el pasado que no saben ver más allá de sus narices. Jefes que tendrán que adaptarse a los nuevos tiempos si quieren ser verdaderos líderes y no quedarse en el típico “ordeno y mando”.

Pues lo mismo, lo mismico, nos puede pasar con los compañeros de trabajo. Anclados como digo en la era de cromañon, empeñados en no moverse de su zona de confort… y todo aquel que pretenda que dé algo nuevo de sí, se convierte en su enemigo público nº 1.

Algunas de las tribus que habitaban las empresas se encuentran ahora en peligro de extinción. Los palmeros, los motivados o aquellos que simplemente se dedicaban a calentar la silla están desapareciendo en favor de otras especies más productivas.

En estos momentos, en los que se está midiendo al milímetro la productividad dentro de las empresas, las compañías buscan perfiles orientados a resultados. De ahí que los llamados pasilleros (que no es lo mismo que pastilleros), aquellos que se dedican a pasearse por la oficina aparentemente muy ocupados pero sin mucho que hacer, estén en peligro de extinción.

Quienes pululaban por los pasillos para dejarse ver, ahora tienen que demostrar que hacen su trabajo y son eficaces.

Lo malo es que hay empresas que se han quedado igual de desfasadas que esos jefes tóxicos o esos compañeros tóxicos, y son las primeras en no promover una cultura de abandono de la zona de confort, ni siquiera asomarse ahí fuera te dejan, no sea que respires aires limpios y contagies el aire podrido y corrupto del interior.

Gracias a dios los centros de trabajo también están cambiando.

Uno de los personajes que están ganando relevancia es el que se hacen notar a través del mundo online. Las redes sociales han propiciado la aparición de esta figura que busca notoriedad a través de estas plataformas, porque en las oficinas ya no dispone de ese foro en el que alardear de sus logros. Si quieres estar en la onda hay que tener un friki en la oficina. Es el momento de los directivos y mandos con capacidad de que las cosas ocurran, “que saben activar al equipo para que profesionales con capacidad y bien dirigidos logren resultados extraordinarios”.

En fin, habrá que tener paciencia… mientras todo esto llega a nuestras vidas, y como friki de mi oficina y de las de alrededor, os dejo con este temita para animaros el día: Pereza – Superviviente.

Fuente: http://www.expansion.com/2014/01/03/emprendedores-empleo/desarrollo-de-carrera/1388769820.html

 


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