Susana Díaz, nueva secretaria general del PSOE-A: "Se abre una nueva etapa"

La presidenta de Andalucía, Susana Díaz, ha sido proclamada secretaria general del PSOE de Andalucía al conseguir el respaldo del 98,63% de los delegados asistentes. De los 732 votos emitidos, 722 han sido a favor y 10 en blanco.
Susana Díaz se ha convertido en la quinta persona que ocupa la secretaría general del PSOE andaluz y la primera mujer desde que José Rodríguez de la Borbolla fue aclamado como líder del partido en diciembre de 1979.
Durante su intervención se ha mostrado convencida de que el partido necesita un "impulso", y por ello ha pedido el voto para ser elegida en esta región. "Aquí culmina un proceso de renovación y se abre una nueva etapa", ha matizado. Además, ha hecho autocrítica de los errores que ha cometido su partido en Andalucía, y ha insistido en que "no hay que tener miedo" a reconocerlos. En su opinión, el principal problema ahora es el del paro.
"Me presento a recoger el testigo con orgullo (…) y con un compromiso de la unidad de todos los socialistas, es lo que más fuerte nos va a hacer ante los ciudadanos"
La nueva secretaria general del PSOE-A, Susana Díaz, ha diseñado una Ejecutiva más joven reducida, con 31 miembros y composición paritaria -16 mujeres y 15 hombres-, a la que incorpora 20 caras nuevas, entre ellas ocho alcaldes y varios miembros de Juventudes Socialistas, y en la que suprime la Vicesecretaría General y sitúa al secretario de Organización, el gaditano Juan Cornejo, como 'número dos' de facto.

Díaz cerró poco antes de la medianoche tras una consulta conjunta con los secretarios provinciales la composición de la Ejecutiva, en la que Sevilla, con ocho miembros -incluida la propia secretaria general-, es la agrupación con mayor número de representantes, seguida por Granada y Almería, con cuatro cada uno, mientras que el resto de provincias -Cádiz, Córdoba, Huelva, Jaén y Málaga- cuentan con tres. Entre las novedades resalta el acceso a la Presidencia de la jiennense Micaela Navarro, exconsejera de Igualdad con Chaves y Griñán.
“Quiero que los ciudadanos puedan decir que nosotros sí les representamos. Está en nuestras manos recuperar esa confianza”, ha dicho Susana Díaz. Para ello, ha pedido “unidad” al PSOE y ser “implacable contra la corrupción”. La presidenta de Andalucía, ha ofrecido un discurso cargado de autocrítica, pero también de optimismo en el futuro. “Hay cosas que no hemos hecho bien y no pasa nada por reconocerlo”. "Ha habido comportamientos que nos han alejado de los ciudadanos”, ha afirmado tras apuntar que “mucha gente cree que todos los políticos son iguales”, por lo que pide un partido en el que “las conductas sean ejemplares”.
Para recuperar esa confianza ciudadana, el PSOE debe “abrir sus puertas”, ser más “transparente” y conseguir “cuanto antes” la unidad del socialismo. Su intención es abrir “un nuevo tiempo” en un partido “centenario” y que el PSOE esté más fuerte, unido y cohesionado, para lo cual se va "a dejar la piel”, asegura. Ha afirmado que se plantea dos objetivos al frente del partido en Andalucía: “que el PSOE no se haga conservador y siga siendo de izquierdas” y que la organización “no se rompa”, y por eso ahora es el momento “de la unidad del PSOE”.