No podemos partir de New York sin recorrer los pasillos y rincones de la tienda más chic y exclusiva de Manhattan. Se trata de un gran almacén de lujo, sin el espíritu del shopping actual, que mantiene la tradición de un "department store" y hace de la esmerada atención y del discreto acompañamiento una marca registrada. Situado frente al Plaza Hotel,a ambos lados de la 5ta. Avenida, B&G es una invitación a viajar en el tiempo, a la época en que Grace Kelly o Jacqueline Kennedy lo visitaban como clientas asiduas y realizaban las compras allí.
Con motivo de celebrarse su 111° aniversario, la tienda se encuentra más embellecida aún, y a cada paso podemos encontrar siluetas alegóricas a los cambios de la moda que sucedieron fuera de sus paredes y se vivenciaron dentro...
Ver detalle de estampa en el vestido que reproduce la fachada del edificio
Ya dentro, el tratamiento que recibamos será de "lady" o "gentleman" según corresponda, y la cortesía nunca será dejada de lado. Hasta permiten sacar fotos. Gracias a ello pude registrar muchas bellezas que en sus tiendas originales me fue imposible dada la prohibición de tomar imágenes, así que acá les muestro algo de ello. Perdón por la calidad de algunas tomas, pero la luz estaba complicada. Falta más, como siempre...
Clutches by Alexander Mc Queen
Zapatos Valentino
Clásicos by Chanel
Chatitas bien parisinas
Manolo Blahnik en colores a los pies... Tendencia instaladísima para otoño-invierno
Versiones de lujo, edición limitada
Lo más distinguido... Roger Vivier y la impronta sixties
Detalle de los corredores que intercomunican los salones
Tom Ford. Azul y negro; must de temporada
Como venimos diciendo en otros posteos, blanco y negro, tendencia total
Marini y sus colores vibrantes. Estampas y diseño de vanguardia
Marc Jacobs y la paleta más vista por aquí: violáceos, fucisas, azul noche y verde oscuro; largos modulares bajo la rodilla y el espíritu retro como un denominador común en varios diseñadores
Proenza Schouler en estallido naranja
Esta recorrida en particular la hicimos Lucre y yo solas, así que pudimos compartir la misma fascinación ante tanta belleza. Observen la Lady Dior en tweed fucsia que decora el estante del espacio Dior. Sin palabras...
En plena 5ta. Avenida; con Berdorf & Goodman detrás, no pude resitirme a la foto de recuerdo. Vale la pena vivir la experiencia; porque como digo siempre: aunque no tengamos acceso a estas cosas, disfrutar de lo bello no cuesta nada y reconforta. ¿Por qué privarse de conocer un lugar así, verdad?
Espero que este recorrido les haya gustado; aguardo sus comentarios y opiniones, como siempre. Me encantaría que quienes hayan ido cuenten sus experiencias en B&G. Perdón que actualice tarde, pero a veces el cansancio le gana a la vida on line. Nos leemos, amig@s... Buen miércoles!