Susurros es el primer libro de la trilogía con la que comparte el nombre. Escrito por A. G. Howard nos presenta la siguiente sinopsis:
A Alyssa Gardner las flores y los insectos le hablan. Teme que su destino sea acabar en un psiquiátrico, como su madre, pues una vena de locura recorre su familia desde tiempos de su antepasada Alicia, la niña que inspiró el País de las Maravillas de Lewis Carroll.
Pero ¿y si los susurros de las flores no son alucinaciones? ¿Y si el País de las Maravillas existe y la está llamando?
Alyssa descenderá por la madriguera del conejo hacia un mundo mágico, pero también despiadado. Durante su increíble aventura, tendrá que decidir en quién confiar: en Jeb, su mejor amigo, por el que siempre se ha sentido atraída, o en el fascinante y seductor Morfeo, su guía en el País de las Maravillas y con el que lleva soñando desde que era niña.
El libro de Howard nos presenta una historia totalmente "diferente" de nuestra idea del país de las maravillas.O eso es lo que nos quiere hacer creer. Ya que, aunque nos sorprende con alguna pincelada de originalidad, esta historia ya esta inventada. Y es que no pude dejar de pensar en la versión de Tim Burton, Alicia en el país de las maravillas, lanzada en 2010. Sin duda, me parece una especie de burla para los lectores, o no sé, una "adaptación" más que adaptada.
Sin embargo, si pasamos por alto este detalle y nos centramos en más aspectos del libro, veremos que el panorama no mejora. La forma de narrar del autor no puede pasar de mediocre. No tiene ningún adjetivo a su favor que me ayude a calificarlo. Ningún rasgo cualitativo que lo diferencie de un ordenador escribiendo una historia.
Y si comentamos a los personajes que llevan a cabo esta gran aventura, nos meteremos en un terreno bastante peligroso. Por un lado tenemos a nuestra protagonista femenina, Alyssa, una pelele en todos los sentidos. No me ha gustado nada, desde su forma de vestir, hasta su forma de pensar. Eso si consideramos que ella piensa, porque desde luego lo demuestra pocas veces en el libro.
Es un personaje fácilmente manipulable, y bueno, ahí es donde reside el peso de las acciones que narra el libro. Por otra parte nos encontramos a Jeb, algo así como su compañero/amigo/amor de la infancia. Já. Me rió en su cara, es realmente el personaje más enervante con el que he tenido el no-placer de tratar. Pesado, plano, obsesivo, celoso y controlador. ¿Hola? ¿Alguien busca un maltratador psicológico adolescente? Pues ahí lo tenemos, siempre en escena. Bueno, quizás me este pasando, pero... ¿Como calificarías a alguien que esté siempre encima de una chica, aun teniendo novia, mientras la confunde una y otra vez? Pues eso...
El único personaje que no me ha caído mal ha sido Morfeo, que es el único que tiene dos dedos de frente. Es el típico personaje secundario encantador, que consigue que sigas leyendo este libro, aunque seamos sinceros, ya no te interese lo más mínimo. El es tranquilo, calmado e inteligente. Es paciente con Alyssa, la muy inútil se sigue dejando manipular por unos y por otros.
El ritmo de la novelame ha parecido lento, casi rozando el aburrimiento. La ambientación me parece un plagio, ya plagiado, y los personajes unos seres insufribles. Y si para colmo la pluma que lo narra no pasa de ser un mero mensajero y no aporta nada al libro, tenemos este increíble cóctel que se puede resumir en una palabra:Malo.
Es así, este libro me ha parecido malo en todos sus ámbitos, así que si estabais pensando en leerlo, no lo hagáis, no os lo recomiendo. Eso sí, si os gustan las historias repetidas, sosas y los personajes odiosos, esta es vuestra novela.
Y si, básicamente por lo único que destaca el libro es por la portada, a la que calificaría como hermosa. Pero aun así, no merece la pena.