Una parte importante de la jerarquía católica actúan con una preocupante soberbia (por cierto, pecado en su doctrina) que pueden constituir, en algunas circunstancias, presuntos delitos por difamación. Además algunas de las declaraciones pueden incitar a actos violentos de grupos fundamentalistas católicos, de ahí la llamada de atención que se ha cursado a la Fiscalía del Estado.
Las más de 150 plataformas, organizaciones sociales de todo tipo, entidades diversas, sindicatos y partidos representan a varios millones de ciudadanos y ciudadanas, muchos de ellos creyentes e incluso católicos, que apuestan por la democracia y por las libertades, por la laicidad de las instituciones del Estado y por la eliminación de los privilegios jurídicos, simbólicos, políticos, fiscales, tributarios y económicos de los que goza la iglesia católica oficial en España.
COGAM, como una de las entidades participantes de dicha Manifestación, exige el máximo respeto democrático a la Jerarquía de la Iglesia Católica, pues el derecho a la libertad de expresión en ningún caso ampara discursos que fomentan la violencia o el odio.
Alertamos a las autoridades, a los responsables políticos y públicos de todas las formaciones políticas, que nos representan a todos, independientemente de las creencias y convicciones individuales, para que eviten y en su caso no participen en ceremonias y boatos estrictamente católicos en donde se llama a la intolerancia y al incumplimiento de la Declaración Universal de los Derechos Humanos y de leyes aprobadas democráticamente en el Parlamento.
Agustín López Lozano, Presidente de COGAM