Resolveremos puzzles aprovechando el poder de cada color.
En Tag, disponemos de una pistola de pintura que podremos utilizar de manera ilimitada a medida que recogemos botes de distintos colores situados en distintos puntos de los escenarios. Cada uno de los tres tonos que recogeremos (verde, rojo y azul) nos confiere una habilidad especial al tocar superficies pintadas con él. Así pues, si pintamos una parte del suelo de color verde, rebotaremos al pisarla; si la pintamos de rojo, correremos a gran velocidad al pasar por encima; finalmente, el color azul nos permitirá quedarnos pegados y caminar por paredes y techos. Además, podremos limpiar la pintura que no nos convenga con el click derecho.A lo largo del juego, nos moveremos siempre por un entorno tridimensional urbano y gris ambientado con música electrónica, ya que los nueve niveles a completar comparten esta estética. Gracias a la pistola de pintura y a la combinación de colores, podremos saltar, trepar o deslizarnos para resolver distintas situaciones y avanzar, y solo podremos morir si caemos al vacío. Después, reviviremos al inicio del nivel o en el último punto de control. En total, se puede completar en menos de una hora.
En uno de los niveles hay incluso un tren.
Así pues, Tag posee una mecánica que recuerda tanto a Mirror's Edge como al otro videojuego que citábamos antes, Portal (en palabras de Gamespot). De hecho, los programadores fueron contratados posteriormente por Valve para incorporar elementos de Tag en los geles de Portal 2, algo que ya había pasado cuando la compañía había cogido a los desarrolladores de Narbacular Drop para crear la primera entrega.En resumen, una gran idea totalmente gratis que no está de más probar para saber de dónde vienen cosas como ésta.
Link de descarga (55,5 MB)
Un gameplay de Tag: The Power of Paint.