Miamies una ciudad de contrastes y eso siempre es positivo, ya lo dije en otra ocasión, pero cuando el “diferente” eres tú, es inevitable volverse más tolerante. Y la tolerancia hoy en día es siempre un valor añadido, un plus que debería contar en el currículum y en la cola del paro.Lo que está claro es que si la vida te da la oportunidad de irte unos años de tu país, no lo dejes escapar y ¡vuela!
Reconozco que algún ataque de nostalgia he tenido, sobre todo cuando el verano no llegaba nunca y los días eran cortos. De repente me acordaba del calorazo, de la playa, de la vida al sol y siempre siempre, de mis queridas Di y Valle… Ay… A ellas las echo de menos siempre. Y a veces me vuelvo a imaginar haciendo la maleta y poniendo un montón de kilómetros de distancia. Imagino un destino y echo a volar con la imaginación. Y también alguna vez, se lo he llegado a proponer al Currante:- ¿Nos vamos?Pero es tan facilón… Siempre me dice que sí, y así no vale. Tal vez si algún día pone resistencia, a mí me dé por insistir.
Así que, tal y como esperaba, y a pesar del vacile del gobierno de este país, aquí todo sigue igual y yo soy un poquito mejor, o eso me gusta creer.
En esto pensaba en el mes de febrero