San Luis Potosí.-Taladores clandestinos han acabado con alrededor de 400 hectáreas de bosque en la serranía de Tamasopo; cortan los árboles para vender la madera a empresas ferrocarrileras que la utilizan para construir vías.
Integrantes de la comunidad pame o xi’oi que allí habitan ya levantaron una denuncia ante la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, no obstante, las autoridades no han efectuado las acciones necesarias para resolver el problema e, incluso, se dice que los inspectores han recibido sobornos.
Desde hace años, los pobladores de la sierra alzaron la voz para proteger el bosque de niebla, sin embargo, algunos de ellos relatan que recibieron amenazas de muerte por denunciar. Asimismo, comentan que hay contratistas que hacen acuerdos con los comisariados ejidales para talar los árboles, situación con la que no están de acuerdo, puesto que acaban con el medio ambiente.
Los indígenas que habitan en la comunidad La Nueva Palma denuncian que los responsables podrían ser los pobladores del ejido vecino, ya que buscan las especies tan diversas con que cuenta la zona, como el encino, el tepehuaje y el palo de arco o rajador. Ya pueden advertirse los daños al ambiente que ha ocasionado la tala clandestina, como la desertificación del terreno y la escasez de agua, la cual ya les hace falta para su ganado.
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