Taller de tapicería

Este fin de semana ha estado lleno de actividad y cosas bonitas. Colarse en el taller de Yolanda F. Foruny resulta siempre una delicia. Sus talleres son una oportunidad para aprender muchas técnicas y tomar un montón de ideas interesantes. En esta ocasión, en el taller de tapicería, hicimos un precioso escabel lleno de encanto, como Restaura y Recupera.
Evidentemente para poder aprender a hacer esta fantástica pieza lo mejor es pasarse por el taller de Yolanda, pero os voy a hacer un resumen de todo lo que vivimos en ese fantástico taller en el que aprendimos a tapizar.

Trabajos de las alumnas del taller de tapicería de Restaura y Recupera.

¿Cómo tapizar nuestras sillas, sillones y escabel?

Para poder tapizar en casa, lo primero que tenemos que tener en cuenta es que se trata de un trabajo lleno de delicadeza, paciencia y en el que os detalles son importantes. Aunque no se vea el interior, debemos cuidar todo el proceso. Así, que lo primero es hacer una lista detallada de lo que vamos a necesitar.

Materiales para tapìzar.

 Materiales para tapizar:

- Madera para el bastidor: Es importante primero hacer una base de madera sobre la que vamos a montar nuestro tapizado. En este caso nuestro bastidor era de material recuperado y tenía forma rectangular para que encajara en la caja de madera de pino que nos servía de base.
- Cincha de yute: Las cinchas pueden ser de varios materiales. Son las tiras que van a servir para sostener todo el interior de tapizado. Ya veremos, que cuanto más tensas las coloquemos, mucho mejor para sentarse encima.
- Grapadora: Esencial una buena grapadora para todo el proceso y que además tengamos bastantes grapas. 
- Tijeras.
- Husones o alfileres. Los husones son esas agujas que se ven en la foto con la cabeza redonda.
- Tela: De dos tipos: una para la tapicería, es decir, la que se va a ver, y otra dos de algodón blanco para la parte de abajo y el interior.
- Cola de contacto.
- Espuma de diverso grosor. 
Estos son los materiales básicos para poder tapizar, aunque luego existen otras herramientas que nos pueden resultar muy útiles como un tensacinchas o la pata de cabra. Este instrumento se utiliza para quitar las grapas cuando no las colocamos cómo deberíamos. Os dejo una foto donde se ve qué es una pata de cabra. Un instrumento muy útil, pero que cuando lo usemos tenemos que tener cuidado con las manos. Nunca hay que poner la mano delante porque podemos terminar clavándonos la herramienta. 

Pata de cabra para retirar grapas.

PASO 1: COLOCAMOS NUESTRAS CINCHAS EN EL BASTIDOR

Lo primero para poder tapizar cualquier objeto es colocar las cinchas en la base. Con la ayuda de una grapadora fijamos las tiras a la madera.

Cómo colocar la base de nuestro tapizado.

Las cinchas se colocan en vertical y horizontal. Lo tenemos que hacer, de tal forma, que queden entrelazadas. Empezamos por el listón de madera de la parte superior. Colocamos la punta de la cincha pegada a la madera dejando que todo el sobrante apunte hacia afuera. Se grapa un extremo a la madera, doblamos, volvemos a grapar sobre la misma zona de la madera y luego tensamos para volver a grapar en el listón de abajo.

Colocar cinchas para tapizar.

Os dejo una foto del resultado final del primer paso. Vamos colocando las cinchas dejando unos centímetros entre una y otra hasta que quede como aparece en la imagen.

Cinchas colocadas en el bastidor de madera.

PASO 2: COLOCAMOS LA ESPUMA

Sobre nuestras cinchas de yute colocamos una tela de algodón que nos va a servir para proteger el interior. La grapamos a la madera y colocamos encima la espuma. Sobre esta tela vamos a ir tomando las medidas para cortar la espuma.

Tomamos medidas para cortar la espuma del interior.

Todo depende del resultado que queremos lograr. Si nos apetece un aspecto más abombado, la primera espuma tiene que ser más pequeña, como se ve en la foto. Pero si lo que queremos es darle una imagen más plana, la espuma debe ser más grande.

Espuma para el interior del tapizado.

Según la forma que estemos buscando debemos combinar capas más grandes y más pequeñas. Además, tenemos que tener en cuenta la altura final. Cada capa tiene unas dimensiones específicas que vamos a ir sumando hasta llegar a la altura del siento que más nos guste.

Las capas de espuma para hacer nuestro escabel.

Una vez que hemos diseñado el interior de nuestro tapizado combinando las capas de espuma cortamos una última capa de espuma más fina. Ésta capa es la que vamos a usar para cerrar todo el interior y la vamos a pegar a la madera para que quede todo bien sellado.

Aspecto final del interior de nuestro tapizado.

PASO 3: COLOCAMOS LA TELA

Una vez que hemos dejado listo el interior de nuestro tapizado colocamos la tela que quedará en el exterior. La ponemos encima y vamos grapando por dentro sobre la madera. Para que quede bien estirada nos vamos a ayudar de los husones o de unos alfileres. Grapamos primero la parte de arriba, la de abajo y por último los extremos. Dejando las esquinas libres. Sin duda alguna, lo más difícil es lograr que queden bien las esquinas. Por eso, las dejamos para el final y para poder corregir el exceso de tela. Una vez terminadas, colocamos la última tela para tapar todo el trabajo que hemos hecho y que no se vean las grapas. 

Grapamos una tela a la parte de abajo para que no se vea el interior.

Insisto en que éste es un resumen de todo el trabajo que hicimos en el taller. La verdad es que la tapicería es un trabajo artesanal lleno de matices y que conlleva mucha práctica para poder dejar perfectas nuestras piezas. Yo por lo menos estoy muy orgullosa de mi escabel tapizado a mano. No sé qué os parecerá, ¿os gusta?

Escabel tapizado a mano.

Mañana os cuento cómo hicimos esas letras tan bonitas sobre la arpillera. Han quedado fantásticas. Pero eso mañana...

Escabel tapizado y pintado a mano.

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