¿De qué va?
El pequeño Oscar (Thomas Horn) es un joven intrepido que busca aventuras constantemente. Su padre (Tom Hanks) es su héroe y el responsable de que Oscar sea así. Todo se tuerce cuando el padre de Oscar muere en el famoso atentado del 11-S. Un año después, Oscar encuentra una llave que perteneció a su padre y quiere saber que abre.
La crítica
Aprovechando la novela de Jonathan Safra Foer, Stephen Daldry muestra al mundo su cuarto largometraje en 2011. Segunda película en la que el protagonista es un crío (la primera fue 'Billy Elliot'; 2000), alguien que ve las cosas siempre con un punto de vista distinto al de un adulto. Aunque esto no suele salir siempre bien.
Daldry comienza la obra como un bonito cuento de hadas: una familia feliz de la cual padre e hijo se llevan fenomenal. Ambos siempre están resolviendo enigmas que propone el mismo padre. Pero a los cinco minutos todo se desvanece y el padre de Oskar muere en el atentado del World Trade Center en 2001.
A partir de entonces, Oskar se aferrará a la idea de que su padre sigue ahí e intenta, por todos los medios, creer en ello. Por esta razón, el joven protagonista acabará encontrando una llave que su padre había guardado en un jarrón azul y trazará un plan de lo más alocado para encontrar lo que dicha llave abre.
'Tan fuerte, tan cerca' se presenta como una obra interesante. El pequeño Oskar insiste en jugar una vez más a aquellos juegos en los que jugaba con su padre y sigue pensando que todo volverá a ser como antes. Oskar es un niño especial que no piensa únicamente como un crío, ya que debe de tener entre diez y doce años, pero su mentalidad está muy por encima de ello.
Así que lo que en un comienzo parecía un bonito cuento, se torna un drama en el que un crío no deja de sufrir por tal de encontrar respuestas, respuestas que quizás no existen. Aunque más cara el final, la obra vuelve a ser ese cuento de hadas que era y tenemos un cuento que, a más de uno, le robará una sonrisa.
Todo tiene que ver con la personalidad de Oskar, que como ya he dicho, es excepcional. Nos ofrece una visión diferente de lo visto hasta ahora y podemos encariñarnos con él hasta cierto punto, gracias a su capacidad imaginativa.Pero no nos engañemos: como drama, no acaba de funcionar. A mitad de la película creeremos que nuestro protagonista no es más que un niño mimado, un malcriado. Vale, es comprensible que pierda a su padre y esté así, pero es realmente excesivo en muchísimos casos.
Así que el personaje de Oskar puede tornarse algo cansino, porque si algo no le sale bien, se cabrea y "la lía parda". Un poquito... lo pasamos, pero abusar no es lo suyo. A partir de entonces podemos ver como la película se hace algo extensa y esa magia inicial acaba por desaparecer. Es más, en esos momentos de sorpresa en los que se supone que el espectador debe quedarse boquiabierto, después de tanta cansera con el pequeño Oskar... No podemos seguir.
Tampoco entiendo del todo la obsesión que ha nacido en Hollywood por querer dar papeles menores a actores de grandes tallas (de los que todos conocemos) como Sandra Bullock, Tom Hanks, John Goodman o Max Von Sydow si al final tan solo veremos al joven Thomas Horn (luego leo quejas sobre 'Los Mercenarios', pero aquí pasa lo mismo). La respuesta es sencilla: se edulcora la obra para poder hacerla más amena. ¿Lo consiguen? Si, puesto que Max Von Sydow salva considerablemente las escenas en las que Oskar se hace irremediablemente pesado.
A fin de cuentas, 'Tan fuere, tan cerca' no es más que una historia con final feliz cuando en realidad, si lo pensamos fríamente, de feliz tiene poco, pero como es cine y somos humanos, consiguen robarnos una sonrisa. Pero no es lo que fue unos años antes 'Pequeña Miss Sunshine', por poner un ejemplo de esquemas semejantes.
Entretenida y entrañable, pero no creo que la nominación a "mejor película del año" que obtuvo hace unas galas en los Oscars, esté justificada. Es más, esta es la primera película de Daldry en la que no obtiene su nominación a mejor director, yo lo dejo ahí.
Información de más
- Nominada a dos Oscars en 2012: mejor película y mejor interpretación masculina secundaria para Max Von Sydow.
- Max Von Sydow es la segunda persona más mayor en conseguir una nominación, con 82 años y 239 días. Tan solo es superado por Hal Hoolbrok con una diferencia de 50 días, nominado en 2007 por 'Hacia rutas salvajes'.
- Von Sydow tuvo que rechazar el papel de Christopher Plummer en 'Beginners'. Plummer ganó el Oscar a mejor actor de reparto.
- Seguna película en la que aparece Viola Davis con temática del 11-S. La primera fue 'World Trade Center' en 2006.