TANGO DEL TORTURADOR ARREPENTIDO, de CARLOS SALEM, por Antonio Parra Sanz
SINOPSIS: Buenos Aires, 1978. A dos años del golpe de Estado, miles de personas son recluidas en centros clandestinos de detención. La mayoría no saldrá con vida. Julio, joven hijo de un poderoso industrial, es uno de ellos, un «desaparecido» más. Salvará su vida el mayor Morales, a cargo del cuartel, porque le recuerda a su hijo fallecido en un accidente. Tres meses más tarde, Julio es «liberado», pero ya no será el mismo. Ha tomado una decisión.
Madrid, 2000. Julio se llama ahora Jorge Luis. Lleva una vida acomodada y solitaria. Durante una salida fortuita, se encuentra con Morales y despierta en él la voz de Julio, que exige venganza. Se introduce en la vida del exmilitar para destruirlo, y desarrolla hacia el hombre que debe matar un afecto que no tuvo por su propio padre. Pero la historia de ambos es una canción triste, un tango fatal del que ya suenan los compases finales.
TIEMPO Y JUSTICIA
Es posible que todo autor argentino que se precie, si tiene una cierta edad, haya sentido en la conciencia la necesidad de escribir en algún momento sobre la dictadura, los desaparecidos o cualquier otro aspecto del tramo más oscuro de la historia de su país. Carlos Salem, desde luego, sí que notó esa punzada, hasta el punto de que la ha llevado consigo durante unos cuantos años. Eso, tiempo y justicia, han podido ser los motores que impulsaron la creación de una historia que primero nació para la escena y luego creció hasta convertirse en la novela que es ahora.
Esos años, ese miedo, la Escuela de Mecánica de la Armada, la picana, los vuelos sobre el Río de la Plata, las madres de Mayo, todo eso está en estas páginas, todo eso está también en la voz, y el pensamiento, de Julio, o de Jorge Luis, que en ese otro hombre salió convertido desde su encierro el protagonista de la novela.
¿Cómo se puede convivir con el dolor, con el miedo, con leyes que dejaron impunes a los torturadores? ¿Cómo se puede vivir sin los compañeros caídos, sin las hermanas muertas, sin que un atisbo de justicia se eche a la calle de un país nuevo? Pues con mucha dificultad, con la voluntad de no terminar mirando hacia otro lado, con la decisión de aferrarse a un presente al que sacarle, aunque sea a palos, el pasaporte para la tranquilidad, el boleto para que la venganza ponga las cosas en su sitio.
Salem ha manejado muy bien los planos temporales, el ayer y el nuevo hoy, incluso los planos geográficos, de Buenos Aires a Madrid, pero también ha sabido contar con las mujeres que han jalonado la vida de Julio/Jorge Luis, ya se llamen Marcela, Alba o María Luisa (incluso la amenazante Lucía). Las figuras de los dos militares que le torturaron se prolongan en ese tiempo, ignorantes de lo que les aguarda, porque quien entró preso salió renovado, siendo otro hombre (o acaso dos) muy diferente.
La decisión de matar o no matar está latente durante toda la novela, hasta el punto de que esta se convierte a ratos en esa balanza que lleva en su mano la ciega diosa de la justicia. Sobre sus páginas, el lector tendrá que elegir también, y posicionarse a un lado u otro, con Julio o el nuevo Jorge Luis, porque la decisión a tomar no es baladí. Han pasado muchas décadas, es cierto, pero la huella de aquellos años no debe desaparecer, acaso ese sea el principal objetivo de una novela que abre las costuras de muchas conciencias, tanto de allá como de acá.
CARLOS SALEM nació en Argentina y lleva en España «algo más de media vida». Es novelista, poeta y periodista. En narrativa, la novela negra es su campo de acción habitual, aunque como lo definía Fernando Marías: «Salem es un género en sí mismo». Desde que debutó en 2007, sus obras han sido publicadas en España, México, Argentina, Italia, Alemania y especialmente en Francia, donde goza de gran prestigio.
Ha ganado los premios Silverio Cañada de la Semana Negra de Gijón, Novelpol, Paris Noir, Mandarache, Internacional Seseña de Novela, Valencia Negra y Violeta Negra, además de ser finalista en varias ocasiones del Dashiell Hammett, o de los Prix 813 y SCNF en Francia. Entre sus títulos destacados: Camino de ida; Matar y guardar la ropa; Pero sigo siendo el rey; Cracovia sin ti; Un jamón calibre 45; En el cielo no hay cerveza, y Muerto el perro. Es también autor de la serie de la Brigada de los Apóstoles encabezada por Dalia Fierro y Severo Justo, que se inició en 2021 con Los que merecen morir y se consolidó con Madrid nos mata en 2022 y Los dioses también mueren en 2023. Tango del torturador arrepentido es su libro número 50.