Tania, la primera en abandonar el barco

La verdad es que sorprenderme, sorprenderme no me ha sorprendido demasiado, yo diría que no me ha sorprendido nada de nada. Dentro de mi nivel de sorpresas me puede sorprender más que esta noche salga la luna a que Tania Sánchez se haya acabado marchando de Izquierda Unida. Esto último no es una sorpresa, era una evidencia de la que lo único que quedaba por saber era el cuando y como porque que iba a pasar lo sabían hasta los chinos.

No es que a mi Tania Sánchez me caiga algo bien, es que me cae rematadamente mal, pero en mi eso es lógico, tan lógico como ilógico es que le pudiera caer bien a alguno de sus compañeros de Izquierda Unida, y además hay muchos motivos para ello, pero uno más que evidente. Tanto ella como su queridísimo y famoso novio Pablo Iglesias se han aprovechado mucho de todos los de su alrededor, pero de quien más se han aprovechado y de quien más se han reído es de Izquierda Unida. No es que a mi esto último me importe demasiado, no me importa nada todo lo malo que le pueda suceder a Izquierda Unida, lo que pasa es que me sorprende.

Me sorprende porque encima en Izquierda Unida se lo han puesto a estos dos en bandeja de plata y además casi les han dado hasta las gracias. En este caso, y mira que me caen mal los de Izquierda Unida, tanto el coletas como la busca chollos a su hermano se han aprovechado de la buena fe, o mejor de la ignorancia de los compañeros de partido de Tania, que no sólo la habían dado facilidades, si no que encima la habían votado para ser la candidata de Izquierda Unida a la Comunidad de Madrid, de guasa vaya.

Mientras tanto Tania auto concediéndose viviendas de protección oficial en su pueblo, otorgándole contratos a su hermano, yendo de plató en plató en su calidad sobre todo de novia de y pegándose unos viajes a gastos pagados a cuenta de Podemos.

Ahora esa manzana madura que era Tania se ha caído del árbol de Izquierda Unida. Se ha caído de un árbol en el que todas las manzanas están maduras y algunas incluso podridas, pero ella ha caído en una zona bien mullida y va a ser recogida enseguida por su noviete que la colocará a la voz de ya. Lo peor de todo para Izquierda Unida es que la cuchara se la entregaron tan rápido y con tanto agrado a Podemos que ahora se van a quedar en nada, o en menos nada. Si se juntan con Podemos serán los últimos de la fila y si no se alían a Podemos también, por mucho Alberto Garzón que quieran colocar ahora.

Esta es la eterna historia de Izquierda Unida, de lo que pudo haber sido y no fue. Siempre parece que van a hacer algo pero nunca hacen nada, de lo que me alegro y mucho, ahora espero que pase lo mismo con Podemos, que pasará.