
Portalegre fronteriza en el extremo norte del Alentejo se encarama en un altozano amurallado. Tanto el museo municipal como el museo de tapices merecen ser visitados.
El Museo Municipal destaca por su escultura religiosa a lo que debe añadirse las donaciones de colecciones realizadas por particulares. Los objetos que producen afición son siempre curiosos: cajas de rapé, mobiliario o … abanicos.
La decoración de los abanicos admite de todo y ¡cómo no de matemáticas! Un abanico muestra las alegorías de las artes mecánicas, las ciencias y las bellas artes. Una alegoría femenina de la geometría y otra de la astronomía son representadas.

Quizá el mayor interés lo encontraremos en el Museo de Tapices, una fabricación relativamente moderna en la ciudad que nos enseña como se sigue trabajando.

Destacamos como los números muestran la gama de colores que han de regir el tejido con un patrón de una cuadricula milimetrada. El cartón del tapiz debe pasar por la cuadrícula numerada y después al telar.
