A veces improvisar en repostería también tiene su recompensa. ¿Qué podía hacer con una plancha de hojaldre que me quedaba en el congelador y almendra molida? una tarta muy rápida de almendra y mermelada.
En la operación limpieza general de primavera no os olvidéis nunca de incluir el frigorífico y el congelador. Esos paquetes congelados sin marcar, perdidos en las estanterías del congelador, tienen fecha de caducidad y hay que cocinarlos o al final terminan en la basura y eso NUNCA! :)
Ésta básicamente fue la razón para hacer esta tarta tan fácil, utilizar una plancha de hojaldre que iba a caducar, un par de ingredientes más y listo. Improvisé, inspirándome un poco en esta tarta de hojaldre, frangipane y manzana que os hice hace un par de meses.
Como la tarta no lleva relleno de crema, algún elemento de guarnición (helado, nata o creme fraiche) le va fenomenal para convertirla en un postre completo, pero así, tal cual, par un café, a mi me parece que está estupenda. Como siempre, es muy fácil de hacer, espero que os guste. ¡Feliz viernes!
Receta de Tarta de almendra y mermelada
Ingredientes:
– 1 lámina de hojaldre del super
– 2 huevos L
– 125 g de azúcar
– 125 g de almendra molida
– una pizca de canela
– 1 cucharadita de extracto de vainilla o el interior de una vaina
– mermelada de cereza (o fresa, o frambuesa o arándanos… vuestra favorita)
– azúcar glass para adornar
– helado de vainilla, nata montada o creme fraiche para presentar
Elaboración:
– Precalentar el horno a 180ºC.
– Desenrollar la lámina de hojaldre y pincharla bien con un tenedor.
– Colocarla sobre un molde rizado bajo, incluyendo el papel que traía en el envase y recortar los bordes de masa si sobrara. Meterla en la nevera mientras preparáis el relleno.
– Batir 6-8 minutos los huevos con el azúcar.
– Añadir la almendra molida, la vainilla y la canela y remover con movimientos envolventes con una espátula. Reservar.
– Sacar el hojaldre de la nevera y poner una capa de mermelada a vuestro gusto, después echar la mezcla de huevos y almendra sobre la masa en el molde y hornear 35-40 minutos a 180ºC.
– Cuando esté hecha, sacar del horno, desmoldar y dejar enfriar sobre una rejilla. Espolvorear con azúcar glass.
– Podéis servirla tal cual o con alguna guarnición.
Fotos y receta: delikatissen