En todos los cumpleaños y, a casi cualquier evento al que asistimos con los más peques de la casa, nos encontramos con la tan ansiada actividad del "pintacaras". Ese gran momento en el que los peques se convierten en Frozen, Batman, Spiderman, Gatito, Conejo o León (entre otros) pero, no todos los niños se quieren o les gusta pintarse la cara y, no ayuda tampoco el que haya "animadores" que pintan con un dudoso gusto y, en vez de una guapa princesa igual salga un trol de las cavernas.
Pintacaras infantilPara ello, os vamos a contar una bonita alternativa, que tanto grandes como niños les encanta y, te vamos a dar unos consejos de cada una de las dos opciones.
Tanto si hay temática en la fiesta como si no, casi todos los niños quieren pintarse la cara ya que, es una manera de verse disfrazado aunque vayan con la ropa de calle pero, ¿a todos los niños les gusta?
Hemos descubierto que a partir de los 7 u 8 años, es más fácil ver que los niños no se quieren pintar la cara (aunque les pese a muchos padres que les obligan muchas veces). Se sienten muy mayores para hacer "esas chorradas" como dicen ellos. Esto se da bastante más en los chicos que en las chicas y, se les pasa cuando cumplen los 25-30 años 😉 Tattoos corporales infantiles
Con las mismas pinturas y los mismos pinceles del pintacaras, se pueden hacer divertidos talleres de tattoos infantiles, es decir, les pintamos el brazo, el tobillo, el hombro o la mano en lugar de la cara.
También hay temáticas para los diferentes eventos, si vamos a un evento "urbano", todos los tattoos suelen ser tablas de skate, grafittis con el nombre del niñ@, calaveras, etc. Si estamos en una fiesta de "princesas", haremos dragones, animales fantasía, baritas mágicas, estrellas o corazones divertidos.
Estos son solo algunos ejemplos que puedes realizar en las fiestas infantiles y, además, te aseguras que los chicos más mayores también se pinten y vayan fardando de tattoo con sus coleguitas.