Revista Cultura y Ocio
Para la entrada de hoy, que ya no es lunes, me he salido de los parámetros y de los estilos. Supongo que hay un momento para cada manifestación artística y llevo unos días indagando en un mundo que no es de lo que he conocido o he estudiado, pero que al verlo, me quedé simplemente enamorada. Al artista que presentaré hoy, lo conocí gracias a uno de esos e-mail que recibimos a diario y que se van acumulando a la espera de los diez minutos que concedemos cada día para abrir, ver y reenviar. Desde que lo vi – hace un par de semanas- su nombre me quedó rondando en la cabeza y no tuve más remedio que estudiarlo, contemplarlo y disfrutarlo. Hoy quiero compartirlo con ustedes y ojalá puedan disfrutarlo como lo he hecho yo.
Antes de hablarles de este artista, que intuyo que muchos de ustedes conocerán, quiero hacer un breve resumen por la pintura japonesa y sus diferentes manifestaciones en el espacio y el tiempo, esto permitirá que podamos comprender de un modo más sencillo, la época que vivió y el por qué de su trabajo.
La pintura en Japón es una de las corrientes artísticas más refinadas y abarca una cantidad sorprendente de estilos. Podríamos decir que es una de las pinturas con más variedades en estilo, técnicas y temáticas, del mismo modo en que podríamos decir que es una de las manifestaciones artísticas más sobrias y elegantes. Hay vestigios de cerámicas que corresponden al periodo prehistórico y en donde podemos observar una pintura de extraordinaria belleza. Precedida por el período Nara, la dinastía China Tang influenciaría en la temática y en esta época, se realizarían ambientaciones de corte y religión. Sin embargo, es en el período Heian, en donde se observa el mayor desarrollo de arte que ha tenido la pintura en Japón y es en donde nace, el estilo tradicionalista Nipón llamado: Yamato-e y es en donde predomina la pintura sobre rollos de pergamino (emaki). Los emakis continúan en la época del Kamakura pero el estilo que predomina es el religioso, sobretodo se representa con mayor énfasis al Buda Amitabha. Luego aparece la era Muromachi y es en donde la pintura monocromática en tinta llega a su auge, pintura que tiene tanta influencia china que hasta resulta impresionante.urante el periodo Azuchi-Momoyama se realiza una pintura más bien de “palacio” y las láminas de oro son lo que predominan. Esta manifestación es patrocinada por los Shogunes y fue caracterizada como el arte oficial de esta clase social y llegamos finalmente a la Era Edo, donde floreció la escuela de pintura decorativa Rinpa que se ocupa de temas tradicionales e impulsa el estilo Yamato-e y el artista del que hablaré hoy, fue uno de sus principales exponentes.
TAWARAYA SOTATSU
Se le asocia con el comienzo del año 1600. Fue un artista japonés y cofundador de la escuela Rinpa de pintura Japonesa. Sus comienzos en la pintura están asociados con su fascinación por la cultura cortesana de Kioto. Pintó fondos de oro y plata para los escritos del calígrafo y diseñador Honami Koetsu. Era un artista destacado con los proyectos que incluyesen abanicos y biombos. Fue pionero en el contraste de color y lineas y fue quien popularizó la técnica tarashikomi (técnica que se realiza a partir de la creación de un color sobre otro vertiendo el primero mientras la pintura esté fresca). Destacó en la pintura monocromal puesto que, utilizaba la tinta como si se tratase de un color más y en muchos aspectos, podríamos decir que Tawaraya Sotatsu fue un artista futurista y atrevido, probablemente por ello, es que su nombre quedó en el legado de artistas que la cultura Nipona ha dejado para el mundo.