La temporada de tazones colegiales da comienzo y con ella el proceso de evaluación de prospectos rumbo al Draft NFL 2018, en muchos casos esta es la primera vez que los scouts ven jugar en persona a los prospectos. Por ello te dejamos los jugadores a seguir en los eventos más próximos.
Los que encontrarás en esta lista no son todos lo que se declararán como elegibles, son en realidad los que para este momento están en promedio dentro del top 100 de los big boards ya publicados o lucen, en el mejor de los casos, con una proyección de ser tomados en las primeras tres rondas.
Si no pueden ver en vivo los encuentros aquí en listados, pueden enfocarse en buscar videos del desempeño de los jugadores mencionados unos días después.
Sábado 30 de diciembre
Taxslayer Bowl
Louisville vs. Mississippi State
Lamar Jackson – QB, #8 Louisville
Un quarterback con el potencial para ser la pesadilla de los coordinadores defensivos. Posee grandes habilidades atléticas y lo que más llama la atención de su juego es su habilidad para correr con el balón, sin embargo su capacidad para lanzar es mejor de lo que muchos le dan crédito, tiene un potente brazo capaz de realizar lanzamientos de calibre NFL.
Durante su estancia en el colegial mostró la habilidad para aguantar en la bolsa y lanzar pases de último momento con la presión en la cara, además de que manejó muy bien el sistema ofensivo de su equipo.
Uno de los problemas que presenta es que debido a su físico delgado y pequeño puede no ser durable en la NFL. Para encajar perfectamente en el siguiente nivel tendrá que agregar peso, trabajar en su puntería y madurar como líder en el campo.
En 2017 completó 60% de sus pases para 3 489 yardas con 25 TDs y seis intercepciones. Por tierra promedión 6.9 yardas por acarreo para sumar 1 443 y 17 TDs.
Dos comparaciones han surgido a su alrededor, la primera indica que su proceso de selección ha comenzado tan por debajo del radar como el de Deshaun Watson y la segunda indica que su estilo de juego es similar al de Michael Vick en un cuerpo más alto y lanzando con el brazo derecho.
Si un equipo quiere tomar el riesgo de seleccionarlo podría estar frente a un jugador que tenga un impacto tremendo tan pronto como su primer año, lo interesante será ver si esto es sostenible a mediano y largo plazo.
Drew Bailey – DE, #14 Louisville
Un jugador de calidad para detener la carrera en la defensiva de Louisville. La producción como pass rusher no es la mejor, sin embargo hay potencial para convertirse en un jugador sólido en el siguiente nivel.
En 2017, sólo jugó seis partidos debido a una lesión que acortó su temporada y hará que los scouts pongan atención a sus pruebas médicas y tengan que basarse en lo que condiguió en la temporada 2016.
Jaire Alexander – CB #10 Louisville
Un corner con excelentes atributos para ser seleccionado en el Draft. Tiene la capacidad de jugar por fuera de los números o en el slot, cubriendo hombre a hombre y por zona.
Algunos apuntan a que no tiene la estatura ideal, sin embargo su habilidad para cambiar de dirección con facilidad y buen timing para encontrar el balón, lo colocan constantemente en la posición ideal para hacer la jugada.
En 2017 sufrió una torcedura de tobillo y una fractura en la mano, lesiones por las que se perdió de cuatro partidos, pero el nivel de juego que ha demostrado lo ha colocado en el radar de los scouts, registrando 77 tackeladas, dos de ellas para pérdida, siete intercepciones y 15 pases defendidos en su carrera colegial.
Inicialmente había declarado no estar seguro de declarase elegible para el Draft indicando que esperaría hasta después del Taxslayer Bowl, sin embargo ahora se ha dado a conocer que no participará en dicho partido, lo que indica que se está cuidando para evitar lesiones en el proceso de selección.
Martinas Rankin – OT #55 Mississippi State
Un jugador que puede desempeñarse en cualquier posición de la línea ofensiva, sin embargo ha visto la mayor parte – y la mejor – de su acción de juego en la posición de tackle.
Es un prospecto que cuenta con las herramientas necesarias para ser exitoso en el siguiente nivel, como son un físico grande, buen movimiento en el espacio para crear huecos en el juego terrestre, agilidad y balance en protección de pase, inteligencia y un esfuerzo constante.
Tiene todavía aspectos por mejorar como la fuerza de sus brazos, el manejo de pies y el nivel de sus hombros en protección de pase para no quedar con el pecho demasiado expuesto.
Autozone Liberty Bowl
Iowa State vs. Memphis
Anthony Miller – WR, #3 Memphis.
Un receptor sumamente productivo en su carrera colegial. Tras registrar números monstruosos en 2016 y decidir no declararse elegible para el Draft tras ese año, regresó a Memphis para continuar con su dominio y registrar de nuevo más de 1 000 yardas y doble dígito en la columna de touchdowns.
A pesar de tener una estatura por debajo de la ideal para un receptor número 1, es una amenaza an la zona roja gracias a su buena salida de la línea en la que gana cosntantemente a los corners que lo enfrentan.
Definitivamente un elemento interesante para un equipo que busque complementar su cuerpo de receptores.
PlayStation Fiesta Bowl
Washington vs. Penn State
Vita Vea – DT, #50 Washington.
Un jugador que en todos los boards que he visto publicados hasta el momento aparece en el top 20.
Posee la habilidad para jugar incluso como defensive end, sin embargo su mejor desempeño es como nose tackle debido a su excelente combinación de tamaño, longitud de extremidades, fuerza y rapidez sobre la línea.
Es un ancla defendiendo el juego terrestre y es capaz de colapsar la bolsa de protección desde el centro como pass rusher. Es capaz de manejar bloqueos de dos contra uno y hacer la tackleada con facilidad.
En 2017 fue nombrado al segundo equipo All-Amercian, al primer Euipo All-Pac-12 y recibió el reconocimiento Pat Tillman al Jugador Defensivo del Año del Pac-12.
Dante Pettis – WR #8 Washington.
Un receptor sumamente productivo en su estancia en la universidad de Washington. Ha registrado 162 recepciones, 2 216 yardas y 24 TDs. Sólo en su última temporada lideró al equipo con62 recepciones para 721 yardas y siete TDs, incluyendo una atrapada de 73 yardas. En 2016 registró la ridícula cantidad de 15 TDs.
A los scouts realmente les gusta lo que ven en Pettis y mencionan que es un receptor fluido, rápido, como manos rápidas y muy peligroso después de la atrapada, aunque algunos señalan que suelta demasiados pases. Lo cierto es que posee características que los equipos buscan en sus receptores como el correr buenas rutas, buena explosión en la línea y buen manejo de pies.
Además de sus aportaciones como receptor, es capaza de causar impacto como regresador de patadas donde muestra su excelente velocidad y aceleración.
En 2017 fue nombrado al Primer Equipo All-American por consenso y al Primer Equipo All-Pac-12 tanto como receptor como regresador de patadas. Tiene el récord de la NCAA con nueve regresos de despeje para touchdown y comparte el récord de NCAA con tres juegos consecutivos con un regreso de despeje para TD.
Coleman Shelton – C # Washington
Este hombre es el líder y el corazón de la línea ofensiva de Washington, es la clave de su juego terrestre y es bastante hábil en protección de pase.
Es lo suficientemente versátil para ser titular en cualquiera de las cinco posiciones, pero su mejor trabajo lo hace en la posición de centro donde muestra un juego físico para imponerse a sus rivales. Aun así parece que será necesario agregar masa muscular para alcanzar su máximo potencial en la NFL.
En 2017 fue nombrado al Primer Equipo All-Pac-12.
Saquon Barckley – RB #26 Pen State
Uno de los jugadores más espectaculares de la clase 2018. Muchos mencionan que es el mejor prospecto en la posición de running back en muchos años (incluso mejor que Leonard Fournette, Ezekiel Elliott y Todd Gurley) y que se trata de un talento generacional.
Posee una mezcla única de velocidad, fuerza y rudeza que le permiten aportar en los tres downs de diferentes formas.
Tiene una rapidez letal para atacar el hueco y acelerar en campo abierto. Para complementar su velocidad, posee también muy buena visión de campo, balance, elusividad y fuerza.
Los totales estadísticos de su última temporada hablan de una productividad suprema: 2 154 yardas totales, 1134 de ellas por tierra, 594 por recepción y 22 TDs.
Seguramente un jugador que no tendrá que esperar prácticamente nada para escuchar su nombre el primer día del Draft.
Mike Gesicki – TE #88 Pen State
Un jugador con el tamaño ideal para jugar la posición en la NFL y que se ha comprobado como un receptor productivo registrando 51 recepciones para 501 yardas y nueve touchdowns.
Es el tipo de tight end hacia el que la NFL está tendiendo; una amenaza vertical y explosiva para el juego aéreo, con habilidades de bloqueo no tan eficientes, de hecho ese podría ser el factor que topara su potencial.
Tal vez no tenga la técnica tan pulida como los productos que vimos ser seleccionados en la posición el año pasad, sin embargo su habilidad lo colocan como uno de los mejores de su posición este año.
Marcus Allen – S #2 Pen State
Es principalmente conocido por repartir grandes golpes al momento de tacklear. Su mejor trabajo lo realiza cerca de la línea de golpeo, sin embargo cuando se alinea profundo en el backfield, también es capaz de bajar rápidamente para apoyar a defender la carrera.
Su agresividad es lo que sobresale, en ocasiones puede ser concebido incluso como un linebacker extra en el campo. Usa constantemente sus grandes golpes para separar al jugador ofensivo del balón.
En cobertura de pase batalla para hacer una buena lectura del QB y de las rutas mientras se están desarrollando. Este no es su fuerte, por lo que el equipo que lo seleccione deberá tener en cuenta que esto es algo en lo que se deberá trabajar y su efectividad en esa área vendrá con el tiempo.
Es uno de los jugadores de backfield defensivo más activos y productivos de la conferencia Big 10. Ha registrado más de 300 tackleadas (el sexto jugador en la historia de la universidad en superar ese número) en su carrera de cuatro años colegiales, mientras que en 2017 registró 64 tackeladas con cuatro de ellas para pérdida, un sack y una intercepción (regresada para 50 yardas), dos fumbles forzados y tres pases defendidos.
Capital One Orange Bowl
Wisconsin vs. Miami
Troy Fumagally – TE #81 Wisconsin.
Un tight end que puede alinearse en cualquier parte del campo; junto al tackle en posición de tres puntos, en el slot o incluso en el backfield como H-Back.
Contribuye constantemente tanto en el juego terrestre como en el aéreo, puede ser tanto un buen bloqueador como atacar el centro del campo para atrapar un pase, lo cual lo hace muy atractivo al ofrecer el paquete completo de un tight end tradicional.
A pesar de no tener gran velocidad, usa sus brazos largos y manos fuertes para atrapar los pases lejos de los defensivos. Su técnica para correr rutas y posicionar su cuerpo crean la separación necesaria para que exista una ventana para atrapar los pases.
En su carrera colegial ha sido titular en 51 partidos y ha registrado 132 atrapadas para 1 596 yardas y siete TDs.
Un prospecto bien redondeado que tendrá impacto en el siguiente nivel.
Mark Walton – RB #1 Miami.
Un corredor con excelente visión y paciencia para permitir que sus bloqueos se desarrollen. Tiene buen balance para acarrear el balón entre y por fuera de los tackles. Usualmente se rehúsa a caer al primer contacto y gana algunas yardas extra, un atributo interesante para un corredor de baja estatura y peso. De hecho es justamente su complexión física lo que podría hacer que algunos equipos lo vean como un corredor complementario
Después de los primeros cuatro partidos de la temporada 2017 sufrió una lesión que terminó con su temporada y con su carrera colegial, ya que a pesar de ser junior, está listo para declararse elegible para el Draft confiando en que la producción de su segundo año (1 117 yardas y 14 TDs) más lo hecho en al inico de 2017 serán suficiente para convencer alos equipo de la NFL de tomarlo.
Chad Thomas – Edge #9 Miami
Un jugador con gran talento físico que aun no logra darle su mejor uso en el campo. A lo largo de su estancia en Miami ha mostrado destellos de excelencia mezclados con rachas en las que luce perdido.
Registró 99 tackleadas, 24 de ellas para pérdida, nueve sacks y siete pases desviados en su carrera colegial.
Dada la poca constancia pero muy buenos atributos, las calificaciones de este jugador serán muy variadas a lo largo del proceso del Draft.