Revista Diario

¿TDAH? Sólo he encontrado barreras

Por Zulema @MamaEsBloguera

¿TDAH? Sólo he encontrado barreras

may
2013 18

posted by on Aprendiendo con dos enanos

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Como ya saben hace unos meses nos enfrentamos a una nueva “valoración” de TDAH por el centro escolar, donde dando un riesgo moderado nos remitían a pediatría. Todo se originó al yo querer tratar las situaciones que mi hijo me describía en el momento del recreo, donde muchas veces era insultado y golpeado. Al ver su expediente llamó la atención la valoración anterior (ignorada por mí) sobre un posible TDAH, y al saber que no había movido nada, me pidieron volver a hacer los test.

 

Muchas preguntas siguen en mi cabeza, aún sin respuesta. ¿De verdad podemos diagnosticar un trastorno en base a comportamientos que pueden ser totalmente normales, teniendo en cuenta la individualidad y que cada persona es diferente? ¿Podemos medicar alegremente para “borrar una etiqueta”y que el individuo entre en la normalidad de “la masa”? ¿Si no hay pruebas médicas que confirmen esta “disfunción” en base a qué medicamos?¿Por qué se pretende meter anfetaminas en el cuerpito de niños sin que tengamos preocuparnos por las consecuencias, simplemente porque no saben a ciencia cierta cuáles podrían ser?

Entiendo que muchas personas bajo desconocimiento, desinformación, miedo, o simple comodidad sencillamente cedan alegremente al sometimiento de un profesional, el cual te intenta convencer que medicarle es lo mejor, que es por su bien, que todo será más fácil. Pero conmigo sintiéndolo mucho esto no vale, a mí no me molesta que mi hijo no pare, le molesta al centro. Parece que cuando un niño es diferente a la masa se le debe etiquetar, debe existir un problema, debe tener algo… ¿cómo es posible que un niño de 8 años piense y no acepte ser sometido sin razones? ¡Algo debe pasarle!

 

Analicemos un poco los test que aseguran que mi hijo padece un trastorno neurológico:

 

  • A menudo no sigue instrucciones y no finaliza tareas escolares.

 

Supongo que aquí no cabe en la cabeza de nadie el que las tareas escolares sean demasiado monótonas y aburridas. Que realmente no le están aportando más que un simple automatismo, y sobre todo, que posiblemente hayan pasado unas cinco horas del día realizando actividades similares.

 

  • A menudo no presta atención suficiente a los detalles o incurre en errores por descuido en las tareas escolares.

 

Vale, metámonos en situación. Nos levantamos a las ocho de la mañana, y de 9 a 2 la pasamos ininterrumpidamente tejiendo con un descanso de 30 minutos. Paramos para el almuerzo pero debemos tener el pedido listo antes de la noche, por lo que nos queda tarea en la tarde para probablemente dos o tres horas más, ¿Al final del día se te habrá escapado algún punto? ¿Indica que puedas tener falta de atención por ello o que has tenido poco tiempo para descansar y relajarte?

 

  • A menudo está en marcha o suele actuar como si tuviera un motor.

 

¿Quién en su infancia no era así? ¿Ya lo hemos olvidado? ¡Qué pronto!

 

  • A menudo tiene dificultades para mantener la atención en tareas o actividades lúdicas.

 

Volvamos a leer el comentario de tejer.

 

  • A menudo extravía objetos necesario para tareas o activdades.

 

Yo a menudo tampoco recuerdo dónde dejé algo, ¿Tengo un trastorno? A veces ni recuerdo dónde aparqué el coche el día anterior, debo estar grave.

 

  • A menudo correo o salta excesivamente en situaciones en que es inapropiado hacerlo.

 

¿Recuerdas cuántas veces te dijo tu madre “ven aquí, estate quieto,que aquí no se puede hacer eso”? Si lo recuerdas creo que ya sabes mi opinión.

 

  • A menudo interrumpe o se inmiscuye en las actividades del otro.

 

La educación no viene de fábrica. ¿Y si miramos el entorno del pequeño antes de incluirlo en este diagnóstico? ¿Realmente se le ha enseñado a no interrumpir? Es más ¿qué hay de malo en interrumpir? La curiosidad infantil no conoce de esperas. Todo es madurez.

 

  • A menudo abandona su asiento en la clase o en otras situaciones en que se espera que permanezca sentado.

 

¿Cuánto tiempo lleva sentado? ¿Por qué esperamos que niños pequeños permanezcan sentados durante periodos largos de tiempo cuando lo que necesitan es simplemente vida?

 

  • A menudo habla en exceso.

 

¿Y para qué estar callado cuando un niño lo que necesita es debatir,conocer y ampliar conocimientos? ¿molesta que hable?

 

Estas preguntas entre otras igual de absurdas y repetitivas, son las que diagnostican la probabilidad de TDAH en nuestros hijos, ¿Cuántos darían positivo? ¿No es absurdo?

 

El día 3 de junio ya tenemos la cita de salud mental, puesto que es lo único que me han ofrecido denegándome cualquier otro descarte en especialistas. Directitos al psiquiatra (ya sabía yo que algo locos sí estamos). Así que ya les contaré el chiste después de pasar por allí y seguir con mis preguntas.

 

Aquí encontramos al Dr. Fred Baughman, neurólogo infantil tirando abajo este trastorno.

 

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