Sí, por fin creo que puedo decir que lo terminé. Con un poco de ayuda de mi chico a la hora de adaptar las nuevas bisagras, pero, finalmente, ya lo puedo mostrar.
Este era el taquillón espantoso al que de forma despreciativa llame 'bestia' en varias entradas.
Pero yo le vi posibilidades. Y ahora esta es 'la bella' en la que se ha transformado.
Como ya dije en otra entrada, sé que los colores que he elegido son bastante arriesgados, pero creo que ha quedado bien. Tiene un aire vintage que me gusta. El azulejo que puse en la parte superior ayuda mucho a esto. Para el resto de la superficie no encontré teselas que me gustaran, así que compré azulejos baratos en tres colores, los rompí y los fui pegando. Los huecos los rellené con el material que se usa para las juntas de las baldosas.No le he sacado fotos del interior porque no sé si lo modificaré. En principio cambié el estante que tenía y pinté el nuevo en el mismo color azul del resto, también hice lo mismo con la base, pero el fondo y los laterales, así como el interior de los cajones los dejé en el color oscuro de la madera original. Creo que, finalmente, los pintaré de azul. Pero tenía tantas ganas de enseñarlo que no pude esperar a hacerlo.Todavía no está colocado en su lugar de destino, en la cocina. Es un sitio muy estrecho, pero se confundirá bastante con la pared que tiene un tono parecido al azul. También pinté en el mismo color un estante que una compañera de trabajo iba a tirar. Cuando esté en la cocina prometo nuevas fotos.