Pero la realidad es que, cuando pienso en mis contactos con estas asociaciones, como ya os digo que son siempre a través del cine, lo primero que me viene a la mente son las frases "tipo" que se utilizan en las películas.Las escenas suelen ser una persona que se sienta en círculo con otras, desconocidas hasta el momento (salvo una, que generalmente es alguien conocido de la protagonista) y que, tras varias sesiones o episodios dramáticos, se dirige un día a los demás, y con silencio de fondo dice; "hola, me llamo Johny y soy alcohólico"
A continuación, puede o no contar su historia; puede o no haber música triunfal, si es que se trata del final de la película. Pero lo que siempre hay es un coro de voces que dice "Te queremos, Johny"
Bueno, y te preguntarás a qué narices viene todo esto. Si es que voy a hablarte de mi oscuro pasado o mi actual adicción.....no seas cotilla y mal pensado que no es así. O sí....Yo confieso que soy adicta a muchas cosas, pero sobre todo soy una adicta a la culpa. Me siento mal por todo. Lo que pasa y lo que no. Tengo un sentido de la responsabilidad rayano en lo absurdo. Podría calificarse de cierta soberbia. Mi marido suele decir que si hay un terremoto en China tendré las narices de creerme que la culpable he sido yo por haber saltado en casa...Imaginad el resto. Y claro, teniendo en cuenta que soy así, pero además soy mujer, madre y trabajo fuera de casa....pues ya tenemos la fiesta montada. Si los niños dicen que el puré de ayer estaba asqueroso, es mi culpa. Y además de verdad....yo lo hice y realmente ni yo misma me lo hubiese comido...verde, líquido y con mala pinta. (pero es que no me gustan los purés, así que tampoco soy una buena catadora de los mismos). Si no llevan el cuaderno que necesitaban (aunque sea porque no me lo han dicho hasta que las tiendas estaban cerradas) también. Si se me olvida que les había prometido un chupa y no lo he comprado....apaga y vámonos. El drama está servido.¿De qué voy entonces haciendo gala de malamadrismos varios, incluido el hecho de ser MUSA del Club? Pues no es postureo. Es que he aprendido a vivir con ello. Sí, me siento culpable por todo, pero me aburre ya sentirme así...Esta "amiga" mía, lo digo con todo el odio y la ironía posible, al igual que aquel anuncio famoso que decía "hola, soy tu menstruación", vive conmigo (al igual que la del anuncio, somos también inseparables, o eso parece) y es lo que hay. Es como esos compañeros de piso incómodos que todos hemos tenido en algún momento de la vida: hay que aprender a llevarse bien en la medida de lo posible, controlarlos, hacer vida a pesar de ellos, y poder apartarlos cuando es necesario. Pero viven ahí. Hasta que encuentras la manera de desahuciarlos. Mientras tanto...¿Cómo se come esto entonces? Pues intentando minimizar sus efectos. Sí, me siento culpable, muchas veces, demasiadas. Pero creo que es parte intrínseca de la condición de madre. No tengo la solución, así que mientras la busco, me encuentro con otras muchas mujeres que pasan por lo mismo. Lo comparto, me río, lloro, me sorprendo porque nadie me critica unas veces, y otras porque sí lo hacen. Pero básicamente me lo paso bien. Al final, ese es el objetivo: reír, siempre reír, y cuanto más mejor. Sobre todo si es de una misma.Y tomo cartas en el asunto dándole la vuelta a aquello que no puedo cambiar. Porque si mis hijos aplauden cuando al preguntar "¿quién ha hecho el puré de mañana, papá o tú?" y les digo que ha sido papá, no pasa nada.....que Papá haga el puré cuantas veces quiera.
Porque ¿sabes qué? Este blog es eso, una reunión, y ahora es cuando toca decir en alto:
TE QUEREMOS, JOHNY. y Johny hoy soy yo.
así es como salimos las verdaderas malasmadres de reunirnos con la culpa....con la cabeza bien alta. jajajajajajajaja