La motivación personal o de grupo está asegurada si el recurso de acción se sitúa en las técnicas que utiliza Team Building para desarrollar sus eventos.
Adopta estos espacios con la plena convicción del rendimiento inestimable que se va a producir en el equipo al compartir la experiencia del evento.
Considera necesaria la puesta en escena de mecanismos que expongan retazos vivenciales interactivos, los cuales provean al participante, de caminos circunstanciales y de soluciones encontradas para realizar un reconocimiento de uno mismo y de los demás.
Esto es, desplegar el valor humano en el aprendizaje jugando con los métodos que propone Team Building, quien genera confianza con la colaboración del grupo,
respeto con el desarrollo y pertenencia al grupo,
competitividad con el compromiso y la capacidad de trabajo en el grupo,
éxito con el diálogo comunicativo del grupo;
en definitiva, será mayor la productividad empresarial y más provechosas las habilidades adquiridas con este tipo de entrenamiento que se inclina a canalizar sus tácticas en eventos, que la pequeña aportación, del poco o mal uso de los mismos, sin tener en cuenta que el potencial individual y grupal de cada uno de los integrantes de una compañía, reporta consecuencias satisfactorias en el camino que desea llevar la empresa hacia su marca.
Los eventos son instrumento y fuente de conexión directa con el espacio socio laboral donde actuamos.
Al compartirlos se consigue obtener referentes en la resolución de problemas, en la espontaneidad por falta de prejuicios asociados al grupo y ante todo, en la creatividad que profundiza incrementando las operativas del trabajo corporativo.