Portada del cuarto número de
Teatro Marittimo
Hace poco el director del periódico CA, que ya se ha comentado en este blog, declaraba que su revista es «la única publicación en España que aúna cine y arquitectura», sin quitarle mérito a CA, hay que ser justos y reconocer que desde marzo de 2012 lleva editándose Teatro Marittimo y que acaba de salir su último número, el cuatro. Aquí ya se han comentado el primer, segundo y tercer números, de esta publicación, creada, impulsada y dirigida por el incansable David Rivera y editada por la Fundación Diego de Sagredo.
Este cuarto número trata sobre el tema de los «monumentos modernos» y comienza con un artículo de Gavin Stamp, titulado «Tragic Triumph», sobre el Memorial de los Desaparecidos de Edwin Luytens, en el que no se menciona el cine; el siguiente artículo, «Monumentos urbanos del mañana» trata sobre las relaciones entre La fuga de Logan y Brasilia, su autor es Fernando Vela Cossio; Olivia Muñoz-Rojas Oscarsson escribe sobre el Centro Pompidou y las películas que se han rodado en su interior; así como Blanca Murillo lo hace sobre las que se han filmado en la biblioteca berlinesa de Hans Scharoun; «El monumento que cayó del cielo» es el título del artículo de David Rivera en el que habla sobre películas recientes de ciencia ficción y la relación de sus naves con extraños edificios actuales; Eduardo Prieto escribe sobre el monumento en la era digital y con este texto finaliza la "sección monumental". Tres miembros de la revista entrevistan al urbanista alemán Hans Stimmann, artífice del nuevo Berlín; la sección «Dime dónde vives» trata sobre la casa del súper-héroe con un artículo de Manuel de Prada; en la siguiente sección «Genius Loci», Jesús Palacios escribe un magnífico artículo sobre la casa Ennis de Frank Lloyd Wright y La mansión de los horrores, documentado, erudito y, como siempre sucede con este autor, descubriendo unas relaciones asombrosas y enriquecedoras; en «Arquimeras» Steven Jacobs "desgaja" de su libro sobre Alfred Hitchcock una parte dedicada a los monumentos; la revista termina con la sección «Speaker's Corner», en esta ocasión una crónica muy crítica de Rivera sobre la Bienal de Rem Koolhaas.
David comentaba el otro día en Madrid el tremendo esfuerzo que le supone publicar Teatro Marittimo e incluso llegaba a dudar que apareciese el número cinco, si bien es verdad que llevo oyendo sus sinceras quejas casi desde el primer número, esperemos que esta vez no sean ciertas y podamos ver pronto el próximo número de una revista seria, bonita y fundamental para los estudios sobre la relaciones entre cine, ciudad y arquitectura.