Los techos altos y los grandes ventanales son grandes pistas de que estamos ante un piso construido en el siglo XIX.
Las renovaciones se han producido a lo largo de los años, para mantener la vivienda segura y de acuerdo con los estándares de los nuevos tiempos, pero ciertos elementos de la arquitectura no se pueden ni remplazar, ni modificar, entre ellos la altura al techo y los grandes ventanales.
Otros como las molduras de los techos o suelos y la carpintería de madera maciza son más susceptibles de cambio en función de los gustos de cada propietario. Siendo sinceros, cuando se vive en una propiedad así es mejor respetar un poco el estilo y fusionarlo con lo que más nos guste, porque ello hará que nuestro hogar sea único y muy especial.
Para evitar esos vacíos en la parte superior de las habitaciones si una vivienda tiene los techos altos es buena idea añadir molduras y/o jugar con detalles de pintura, al igual que elegir lámparas no solo con volumen, sino que cuelguen una distancia considerable (podéis fijaros en las lámparas sobre la mesa de comedor). ¿Qué os parece este piso? precioso ¿verdad? ¡feliz miércoles!
Vía: Alvhem