En diferentes ciudades hay propuestas de arquitectos, para aprovechar las azoteas de los edificios como lugares verdes, cubiertos de vegetación.
Es una propuesta original, para ciudades donde es imposible encontrar un lugar para incorporar vegetación, tan necesaria para el ser humano, pues nos ayuda a contrarrestar los efectos nocivos de la contaminación.
En algunas ciudades alemanas y suizas, se ha convertido en obligatorio, la utilización de vegetación para cubrir los techos en los edificios construidos a partir del 2002. Esto a propiciado que Basilea tenga la mayor área verde por habitante del mundo. Basilea está situada en al pie del Rin, y a conseguido que sus aires sean bastante saludables, y los techos de sus edificios, sean unos jardines espectaculares.
Igual de sorprendente resulta la azotea de la Escuela de Arte, Diseño y Medios de Comunicación de Singapur, en la que su techo está cubierto completamente de una alfombra verde.
Y como proposición disparatada y no menos original, es la realizada por Marco Castro Cosio, estudiante de Nueva York, para incorporar vegetación en los techos de los autobuses del Metropolitano de Nueva York.
Lo cierto es que nuestras ciudades adolecen de espacios verdes, no solo para nuestro disfrute, si no como necesidad de purificar el aire que respiramos.
Fuente gizmag, the balcony gardener