gigante español de las telecomunicaciones Telefónica anunció este miércoles una reducción drástica del peso de Huawei en su red 5G para 2024, en medio de la polémica alrededor del grupo chino acusado de espionaje por Estados Unidos.
Los equipamientos de Huawei serán utilizados "durante el despliegue inicial del 5G", principalmente en España y Alemania, explicó Telefónica en un comunicado.
Pero para "el despliegue masivo del 5G en todas sus operaciones", previsto para 2022, "Telefónica reducirá progresivamente la presencia de Huawei" en los equipos que pertenecen al "core" del 5G, es decir, los software y servicios de almacenamiento informático a distancia por donde transitarán principalmente los datos de los clientes, indicó el comunicado.
Las compras al grupo chino de estos equipamientos disminuirán "hasta desaparecer en el horizonte del 2024", en beneficio de otros "varios proveedores" todavía no seleccionados, precisó una portavoz de Telefónica a la AFP.
De todas maneras, "Huawei sigue siendo un proveedor importante para Telefónica", que continuará usando los equipos de la firma china para las "redes de acceso radio", en referencia a las antenas que permitirán conectar los teléfonos inteligentes a la red 5G, señaló el comunicado.
Huawei está actualmente a cargo de las redes 4G de Telefónica en Europa.
El 11 de diciembre, la filial alemana de Telefónica anunció la selección de Huawei y la firma sueca Nokia para construir su infraestructura 5G en Alemania, en pleno debate sobre la pertinencia de autorizar al grupo chino a participar en los concursos para la instalación de futuras redes en ese país.
Huawei, líder en esta tecnología, es acusado de espionaje por Estados Unidos, que ejerce presión sobre las autoridades alemanas para excluirlo de esos concursos.
La tecnología 5G, que deberá ofrecer una velocidad muchas veces mayor que la de las actuales redes 4G, es presentada como una revolución en materia de telecomunicación.
La tecnología permitirá, por ejemplo, desarrollar la salud online (operaciones quirúrgicas a distancia) o garantizar la conexión de los vehículos autónomos, aunque por otro lado podría sufrir un mayor riesgo de pirateo de datos, que circularán en redes más descentralizadas.