Estrenando nuestro feedly (sustituto por goleada de Google Reader) encontramos un titular de la BBC que nos llama poderosamente la atención: "Are the benefits of telehealth a myth?". Así, sin anestesia, hablando de la telemedicina y de si nos estamos montando castillos en el aire sin tener pruebas.Leyendo algo más, encontramos el origen de la noticia, que vuelve a ser el famoso Whole Systems Demonstrator, que ya fue objeto de análisis en una entrada del blog de verano de 2012. En aquel momento, con la base científica de un ensayo publicado en el BMJ, se comparaban los ingresos y la mortalidad de pacientes del grupo de telemedicina y del grupo control.El proyecto de telemedicina Whole Systems Demonstratror se lleva a cabo de la siguiente forma:
Pero ahora llega el segundo gran estudio del mismo proyecto y lo publica igualmente el BMJ. Su título es "Effect of telehealth on quality of life and psychological outcomes over 12 months (Whole Systems Demonstrator telehealth questionnaire study): nested study of patient reported outcomes in a pragmatic, cluster randomised controlled trial" y analiza diversas variables relacionadas con la calidad de vida en pacientes incluidos en un programa de telemedicina.Las conclusiones son claras:
Second generation, home based telehealth as implemented in the Whole Systems Demonstrator Evaluation was not effective or efficacious compared with usual care only. Telehealth did not improve quality of life or psychological outcomes for patients with chronic obstructive pulmonary disease, diabetes, or heart failure over 12 months. The findings suggest that concerns about potentially deleterious effect of telehealth are unfounded for most patients.En resumen, que no hay mejora en variables medidas con los cuestionarios SF12 (estado de salud), EQ-5D (estado de salud), brief STAI (ansiedad) y CESD 10 (depresión) en los pacientes del grupo telemedicina. Entonces, ¿que nos queda? Un buen paso sería comparar el coste de ambos grupos y asociarlo a las variables de salud y a los ingresos. Todo llegará.Quizás el diseño del proyecto no sea el mejor (no hay dos iniciativas de telemedicina iguales), pero al menos los ingleses se toman muy en serio el estudio mediante ensayos de sus iniciativas para ver si realmente funcionan o no. Ahora a difundir y leer atentamente este tipo de artículos que es una gran forma de aprender y, por supuesto, de mejorar.