La nueva interfaz incluye una "cortina digital" que aplica un filtro digital a los contenidos en directo, convirtiéndolos en patrones abstractos decorativos. Es decir, nos permite tener una especie de salvapantallas de alta gama con el que el televisor se convierte más en una pieza de arte que en un soporte para ver nuestra programación favorita.
Unos dispositivos pensados para impresionar visualmente a quién los contempla por primera vez ya que huyen del diseño tradicional de las pantallas planas actuales y en su lugar apuestan por un marco ancho inspirado en la tipografía "Serifa" que les da nombre.
Incorporan las funciones Smart TV habituales de Samsung, pero se ha prestado especial atención a la parte de la interfaz de usuario, ya que el estudio Bouroullec ha rediseñado el software básico de la marca para crear un nuevo aspecto acorde con el diseño general del televisor, así como un nuevo mando a distancia totalmente personalizado de corte minimalista.
Las nuevas Serif TV de Samsung parten de los 699 euros para el modelo Mini (24 pulgadas) disponible en blanco y rojo, de 999 euros para el modelo Medium (32 pulgadas) disponible en blanco y azul oscuro y de 1.499 euros para la versión de 40 pulgadas disponible también en blanco y azul oscuro.
¿Te animas a poner un Serif en tu salón?
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