Templario y Caballero... nuevos tiempos para conquistar corazones. Nuevos tiempos para buscar la unidad en El Temple creando las condiciones necesarias que permitan avanzar en el camino correcto. Nuevos tiempos para abrir las puertas y ventanas de la casa de Dios al hermanamiento de todos los seres humanos de la Tierra, sin distinción de raza y/o pensamiento, pues en la diferencia está el enriquecimiento del Conocimiento.
El verdadero cristianismo no es una religión. Es una Fe, la orientación de la existencia evolutiva, en Jesucristo Nuestro Señor y su Evangelio. Él no amaba a las religiones, amaba a las personas, liberándolas e invitándoles a buscar la esencia del Padre, que nos hiciera hombres libres y renovadores, para conducir a todos los seres de este mundo hacia una nueva y verdadera Humanidad, prevista en las ancestrales Profecías Bíblicas y en los Evangelios.
Templario.... Observa al hombre "creyente" de hoy en día, que participa de la gran masa que se ha dejado arrastrar por miedo y/o por la esperanza de lograr algún premio, por los sucesivos dogmatismos oficiales que han ordenado a su gusto y capricho la marcha del mundo.
Y observa en el lado contrario y frente a estos, una minoría "consciente" formando un núcleo de proscritos y condenados, porque se atrevieron a enfrentarse, con la sola necesidad de conocimiento, a los preceptos establecidos por los sectores que ostentan el poder, y que sustentan ese poder con la ignorancia y la obediencia ciega a las normas establecidas.
¿En qué grupo situarías la presencia de Jesucristo Nuestro Señor? ¿En los "creyentes" o en el de los "conscientes"?
¿En cuál de los dos grupos situarías a la Orden de Los Pobres Caballeros de Cristo?
Y tú, Templario ¿Por quién y porqué luchas?
Templario y Caballero... hoy en día la fe católica no tiene absolutamente ninguna influencia en las esferas dinámicas de la sociedad moderna, ni en política, ni en ciencia, ni en economía y mucho menos en servicios sociales. Es más, la iglesia católica no está preparada para estos retos y se ve torpe e impotente frente a los desafíos espirituales y humanitarios que atraviesa la sociedad.
Las iglesias se han convertido en lo más parecido a cementerios de santos y mártires. Han abandonado a Dios, y cada vez es más continuo el abandono del sillón Papal en el Vaticano.
Caballero Templario... nuevos tiempos para El Temple que nunca, jamás fue católico. Pero si utilizado, manipulado y traicionado. No condenado. Disuelto, pero no eliminado. Caído, pero no vencido.
El Temple es mucho más que todas las religiones juntas. No hay en el mundo ningún poder establecido, más grande ni más justo, porque El Temple es Dios y tú, Templario eres soldado y templo de Él, tu designio y tu vida entera le pertenecen.
Trabaja y lucha por la unidad del espíritu Templario, la abolición total de las guerras, las desigualdades y la extirpación de cualquier clase de odio predicado en las religiones.
Protege el camino que lleva al reino de la razón, de la caridad y el amor entre todos los seres humanos de este mundo. Honremos la memoria de todos nuestros hermanos ancestrales, Caballeros Templarios y la memoria de nuestro anciano Gran Maestre Jacques Bernard De Molay, para que su espíritu nos acompañe siempre, para mayor Gloria de Nuestro Señor.
+++Nada para nosotros, Señor, nada para nosotros, sino a Tu nombre sea dada la Gloria. +++