Pese a estar en manos de un realizador norteamericano, en el documental SUNDAY SCHOOL WITH FRANZ HINKELAMMERT, su protagonista Franz Hinkelammert, se explaya en un español bastante fluído sobre lo que ha sido la historia de America Latina y la presencia nefasta de Estados Unidos y sus garras desesperadas por hacer de nuestro destino, su merced. Dejando atrás el discurso monetario socio político de Milton Fredman, ahora cual si no fuera suficiente, vamos por la liquidación de las ideologías, de las utopias, las esperanzas de construir un mundo, un país, una ciudad, con gente solidaria, igualitaria, que busque lo mejor para todos.
Estamos pesimamente mal.
Pese a todas las ideas desalentadoras y muy didácticas que nos entrega Franz Hinkelammert, uno queda con extrañas sensaciones. Por lo menos alguien se toma la molestia de contarnos de qué va aquello que instintivamente sentimos que ocurre.
Franz Hinkerlammert, proviente de Alemania, de una familia conservadora y católica, cuando han concluido sus estudios superiores (doctorado) decide viajar lejos de su país por gusto personal y ampliar la cabeza. El destino será Chile 1963 hasta 1973. Le tocará vivir a concho todo el proceso de la Unidad Popular y teje y maneje de Estados Unidos, los millonarios chilenos, Milton Fredman, para derrocar el gobierno de Allende. Claro que el detalle que sigue siendo tratado como algo menor, que Hinkerlammert, no lo hace, es que mucho poder de unos pocos sobre muchos del resto, a costa de que el país padezca de una saña a por las violaciones a los derechos humanos, torturas, desapariciones, pero es que dicen ellos, para lograr ciertos importantes objetivos como en toda guerra, hay unos que deben caer. Solo que para estar en guerra, las armas estaban solo de un lado y para que caigan algunos, digamos que fueron miles más que pocos.
El descaro propio de los norteamericanos.
Realmente un documental que daba no para 50 minutos sino que para mucho más, de hecho al terminar uno queda sentado un rato en la butaca del cine, en espera de un nuevo desajuste técnico y que por tal, volveremos con más. Pero no, el documental ha terminado y uno quiere más.
Totalmente recomendado!!
SINOPSIS:
Según la mitología católica, el séptimo día Dios descansó, y por eso el domingo está santificado, es una jornada luminosa consagrada al astro rey. Jim Finn, con algo de réprobo por llevarse bien con la herejía, no sólo no descansa, sino que vuelve a hacerle una de sus zancadillas a las utopías, mirándolas con su particular perplejidad, que deriva en las películas impensadas con las que nos tiene acostumbrados. Lo que antes en su cine era falso documental y comedia, ahora es el reverso, a partir de un diálogo lúcido con el teólogo y economista Franz Hinkelammert, paradójico sabio ermitaño y peregrino, afincado en San José, Costa Rica, donde cofundó el Departamento Ecuménico de Investigaciones. El ojo testigo de Finn viaja al punto de origen de una teoría que tiene a la “teología de la liberación” como eje para releer los últimos años de la historia universal de la infamia política y socioeconómica, haciendo foco en el Chile de Allende, en Reagan y la relación de EEUU y Latinoamérica, en las utopías que no son tales y en varios otros devenires ideológicos de la cultura contemporánea.
CALIFICACION: ***********************
FICHA TECNICA:
Tíutlo origina: Sunday School with Franz Hinkelammert, Estados Unidos, 2012
Dirección: Jim Finn
Género: Documental
Duración: 50 minutos
Fotografía: Butcher Walsh, Jesse Stiles
Edición: Jim Finn, Cat Mazzami septima pasion