Flequillos Birkin, medias melenas en todas sus versiones, puntas desfiladas, pixies en platino, muchas balayage y tonos calabaza, miel, mantequilla y canela, con uno que despunta sobre los demás: el warm copper. Éstas son algunas de las tendencias que podremos ver este verano 2020 en peluquería.
Roxana Gutu, directora de Lobelia Sagasta, y Sonia Atanes, del centro de taninoplastia SAHB (Sonia Atanes Hair Beauty) ambos en Madrid, nos cuentan algunas más y analizan los que en su opinión son los tonos, cortes y peinados más sugerentes y favorecedores para los próximos tres meses.
En pocas semanas entraremos en lo que probablemente será un verano atípico, marcado por la crisis del COVID-19 y todas las restricciones que suponemos habrá en piscinas, playas, hoteles, etc… aunque afortunadamente, sectores como el de la estética parece que despiertan poco a poco y van retomando el pulso de su actividad, pendientes como cada año de las tendencias de cada temporada. En peluquería veremos muchos rubios más dorados y menos fríos: “Por ejemplo, el tono arena o los avellana y caramelo para las morenas” – nos propone Roxana Gutu, de Lobelia Sagasta, que recomienda además mezclar balayage y babylights para dar más luz y romper la profundidad en la zona de la raíz.
Para las más atrevidas, colores fantasía como el naranja, los amarillos y azules en formato global, bicolor e incluso mechones: “Este tipo de coloración requiere mucho cuidado en la hidratación y sobre todo, retoques de color” – añade Gutu, que apuesta por uno de los tonos que ya causó sensación esta primavera, el warm copper: “Se trata de una mezcla de rubio oscuro y cobrizo sin llegar a ser pelirrojo. Va bien para casi todos los tipos de piel y no requiere decoloración, perfecto en especial para pieles morenas. Se puede combinar con babylights y si no se quiere tocar la raíz natural, balayage de medios a puntas. También se puede mezclar con algún tono fantasía o con distintos tonos de rojo”.
Sonia Atanes, del centro de taninoplastia SAHB (Sonia Atanes Hair Beauty), define este tono como una actualización del cobre mezclado con tonos más oscuros o con reflejos aclarados, algo parecido a una evolución del cobrizo, pero apunta también a otros tonos como el calabaza – “a partir de raíces ombré que se van degradando en función del color de piel y cabello” - el miel, que define como “sencillo, fácil y muy favorecedor”, mantequilla “para las más claras de pelo y tez” o el canela, que ahora en verano, favorece a todas por igual: ”Tampoco debemos olvidarnos de los smoky gold y en cortes, los flequillos Birkin con raya en medio, despuntados o con capas invisibles, ni de los pixies largos y suavizados, los garçons y las medias melenas en todas sus versiones”.
Otra tendencia que continúa de moda es el Hair Dusting, una técnica para personas que no se quieren cortar el largo del cabello y que debe hacerse mechón por mechón, bien estirando desde la raíz y sólo cortando las puntas abiertas: “Es muy común en los cabellos ondulados y rizados. Si está muy estropeado, hay que cortarlo, no valdría la pena hacerlo” – sugiere la directora de Lobelia Sagasta.