Anoche tuve la buena suerte de ser invitada por mi prima Paula Sánchez, para ver TENDIDA MIRANDO LAS ESTRELLAS, una película de Andrés Racz, un cineasta chileno que se le conoce más por su documental "Dulce Patria", que por los largos, ya que éste vendría siendo su ópera prima. Una primera pelícual que se tardó 10 años en ser estrenada, por miles de motivos entre ellos: obstáculos financieros propios del séptimo arte, así como también por la negativa de algunos personajes públicos que no veían con buenos ojos su estreno.
Pero finalmente ocurrió. Confesaré que le tenía miedo a la película, por razones concretas:
1.- porque es chilena y la neta no me gusta mucho, tirando para nada, el cine chileno
2.- porque tanto por sus actores, como sus guiones-historias suelen ser malos, lo que en conjunto crean: "historias cinematográficas superficiales, efectistas", de ésas cosas que las ves y al ratito las olvidaste.
Sin embargo me lancé a la lucha, también porque pese a que "El Rasca" (director de la película), es un tanto gruñon y pocas veces en la vida he logrado conversar sin que peliemos, tenía muchas ganas que le fuera bien, bien, bien y que brillara como todo cineasta sueña con hacerlo.
Y ocurrió que me gustó mucho la cinta, me metí desde el principio en la trama, acontecía que los actores eran buenos o relajados, sin palos incrustados por el poto, con frescura, naturalidad. La historia es bien sórdida, que le va uno hacer, pero siempre con la cuota justa (que la hace tan entrañable), de amor, de solidaridad, de amistad.
Una Paulina Urrutia (Nieves) como esa capacidad enloquecedora que tiene de transformarse en un ser a la vez frágil, encantador, cariñoso y así también repugnante, despiadado, egoísta..... una gran actriz, pequeñita y modeable a morir.
Además el elenco contaba con un Gonzalo Robles, ya no cómico si no que asqueroson, pero con corazón, quién maneja putas, tiene un taxi, es un pinochetista que cuelga una foto de su general en su habitación. También la efímera pero encantadora participación de Rodolfo Bravo, a quien le toca interpretar a un ex tira rebuscandoselas en democracia.
Un caballero y ex boxeador interpretado por Nelson Villagra, que es siempre, siempre un gran actor.
Del resto del elenco todos tienen su espacio de fama que lo cuidan y trabajan con cariño, como el barman que hace Hugo Espinoza, encantador de principio a fin.
Hasta Chamila Rodríguez que me carga siempre, siempre, por su rol eterno de la "mina", en la que siempre es buen momento para mostrar la teta, el poto o lo que bien se pueda, en esta historia calzaba porque le daba suavidad y amor al arrebolinamiento de Nieves (Paulina Urrutia).
Y pensando siempre que la movie es de Andrés Racz, como dice mi prima Paula, un poco de sárcasmo o ácidez, siempre viene bien, con el archi repetido rol del rebelde, rojo, comunista, izquierdoso en manos de Alejandro Goic, a quien su pasado de dirigente estudiantil lo estigmatizó for ever and ever, en los futuros roles ya fuera en teatro o cine, ¿será que no dá para más?.
Digase entonces y modificando (que más no sea un ratito) las posturas radicales indivuales, por esta vez puedo decir con el corazón abierto, que esta película chilena esta TOTALMENTE RECOMENDADA!!
SINOPSIS:
Nieves Carrasco ha asesinado al hombre que intentaba violar a su hermano menor. Condenada a cinco años de prisión, se sumerge en un mundo duro y marginal donde al menos encontrará el cariño y apoyo de “la China”, mientras no pierde la esperanza de algún día salir en libertad y cumplir su sueño de toda la vida: conocer el desierto florido, en el norte chileno. Pero cuando un descuido de sus captores le permite huir las cosas no resultan tan fáciles. Sus sueños deberán esperar, mientras se dedica a manejar un club nocturno donde sus ex compañeras de cárcel se prostituyen.
CALIFICACION:
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FICHA TECNICA:
Titulo original: Tendida mirando las estrellas, Chile, 2000
Dirección y Producción: Andrés Racz
Guión: Diamela Eltitre
Productor alternativo: Felipe Zavala
Reparto: Paulina Urrutia, Nelson Villagra, Gonzalo Robles, Roberto Bravo, Hugo Espinoza, Alejandro Goic, Chamila Rodríguez.mi septima pasion